Los consejeros de Economía y Conocimiento, Antonio Ramírez de Arellano, y de Educación, Adelaida de la Calle, han reclamado al Gobierno central que publique cuanto antes el decreto que permitirá conocer los detalles definitivos de la nueva prueba o ‘reválida’ que sustituirá a partir del próximo curso a la Selectividad, acabando así con la incertidumbre “para que el alumnado pueda centrarse en sus estudios”.
Ambos consejeros, que valoraron en Huelva la celebración de la última prueba de Selectividad, recordaron que el sistema actual “garantiza el anonimato, así como los principios del mérito y la igualdad de oportunidades, pilares que sostienen el acceso a la Educación Superior como un derecho”.
Frente a ello, Ramírez de Arellano explicó o que a partir del próximo año “el acceso será acorde a la LOMCE, lo cual deja aún hoy incertidumbre normativa porque seguimos sin decreto regulador, con la consecuencia de que miles de jóvenes y sus profesores preparan desde hace un año una prueba que desconocen y que puede determinar en buena medida su futuro”.
El titular de Economía criticó además que la nueva prueba “sea obligatoria para todos”, independientemente de que vayan a acceder o no la Universidad, que aceptará como ingreso la media ponderada obtenida entre la reválida y los dos cursos de Bachillerato, sin pruebas adicionales.
Asimismo, ha puesto en valor que la Junta de Andalucía “se adelantó a estas circunstancias en otoño, acordando con las universidades andaluza fijar un acceso en términos similares a los actuales, con el fin de dar seguridad al alumnado”, un acuerdo que “consolida el Distrito Único de acceso, basado en el mérito, y que garantiza que será el estudiante quien elija su universidad, y no al revés”. Un acuerdo que ha sido emulado posteriormente entre la propia Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas (CRUE) y el Ministerio de Educación.
Respecto a la nueva prueba, ha apuntado que tendrá una estructura similar a la Selectividad, el marco será establecido por el Ministerio y serán las comunidades quienes definan las preguntas, pongan las fechas, organicen los exámenes y fijen los tribunales. Pese a las semejanzas con la Selectividad, el estudiante ya no tendrá dos opciones de examen, se examinará de 8 asignaturas (hasta ahora de 4 a 8, 6 de media) y estará obligado a sacar un 5.
La ‘última’ Selectividad
Por su parte, la consejera de Educación de la Junta critica que el borrador del decreto se haya hecho de espaldas a la conferencia sectorial de comunidades autónomas, y contando sólo con la CRUE. Asimismo, Adelaida de la Calle destacó que la reválida “en ningún caso debe ser obligatoria para conseguir la titulación de Bachillerato, ya que para eso está la evaluación continua”.
A juicio de la titular de Educación, “no hay que cambiar lo que funciona bien y las Pruebas de Acceso a la Universidad responden a una metodología bien estudiada y mejorada en el tiempo, contrastada en esta larga experiencia”.
De la Calle destaca también que la evaluación propuesta por el Ministerio no aporta formación, sino que sólo logra segregar al alumnado en función de los resultados obtenidos y dificultar la obtención de la titulación correspondiente, además de determinar su futuro profesional o académico de manera decisiva. Igualmente hizo hincapié en la “confusión” existente en el Ministerio de Educación sobre la titulación del Bachillerato y el acceso a la Universidad.