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El Grupo Garvey presenta su nueva manzanilla Teresa Rivero

Esta manzanilla se ha seleccionado de más de ocho mil botas de la cooperativa sanluqueña

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  • Un vino con más de seis años de crianza, de corte suave y que perdura en el paladar
Con una copa de manzanilla, apreciando su color, su textura, su olor y sobre todo su paladar, Luis Arroyo, director técnico de las Bodegas Garvey, fue el encargado de presentar la nueva manzanilla Teresa Rivero, un homenaje a la matriarca de la familia Ruiz-Mateos, que presenció este acto, acompañado de varios de sus hijos.
El acto se desarrolló en las Bodegas Valdivia, donde el director técnico presentó oficialmente esta nueva manzanilla, criada en Sanlúcar, tal como refleja la denominación de origen, de hecho para la elaboración de este vino, se ha seleccionado el caldo de más de ocho mil botas de la cooperativa Virgen de la Caridad, con la que el Grupo Garvey trabaja desde hace varios años. El objetivo marcado, decía Arroyo, “era hacer un buen producto y hemos seleccionado los más finos y elegantes caldos de esta cooperativa, ya que este vino tiene como mínimo más de seis años de crianza biológica, con uva palomino, en depósitos de acero inoxidable como se realiza en Sanlúcar”.
Y es que la ciudad de Sanlúcar permite, por su cercanía al mar y al río Guadalquivir, un microclima distinto que es lo que mantiene el velo de flor, que perdura de forma natural, evolucionando año tras año.
Pero la textura de este vino es una de las cuestiones que más resaltó el director técnico. “Los aromas de levadura que priman, pero aparte de la acidez y sequedad de estos vinos, tiene una entrada en boca muy suave, por ello resulta un vino muy ligero pero su estructura se mantiene en la boca durante un largo tiempo”.
Dos cuestiones que también resaltó en la presentación es la importancia del maridaje, ya que puede acompañar en los aperitivos pero también es magnífico para mariscos, ensaladas o sopas. La segunda cuestión fue el posicionamiento de esta manzanilla medio y alto, ya que “es una manzanilla de categoría para hacer honor a Doña Teresa”.
Por su parte Alfonso Ruiz-Mateos hizo un paréntesis en su discurso para destacar la gran relación que existe con la cooperativa y los cooperativistas de Sanlúcar. “Durante los últimos seis años le hemos comprado cerca de 40.000 botas que suponen unos 20 millones de litros. Esta compra no se ha basado sólo en criterios empresariales ni mucho menos, ya que en la mayoría de las partidas no era por una necesidad de vino para el grupo, sino por la conjunción de otros muchos aspectos y factores”.
En este sentido, destacó que “nos une una gran amistad, sintonía y filosofía con el Marco, que conlleva a la defensa de todo lo que compone el sector a pesar de que ciertos operadores no lo hayan visto con buenos ojos”.
Por último destacó que “somos los empresarios los que tenemos que aportar ideas, trabajo, perseverancia, dedicación, creatividad para vender más estos únicos y exclusivos y singulares vinos que se producen en nuestra comarca”.
Por su parte, Paloma Ruiz-Mateos destacó que este nuevo vino lleva el nombre de una mujer “unida a la manzanilla y al vino de Jerez desde siempre. Una mujer casada con un hombre gran amante de estos caldos, de gran valor por su elaboración y exclusividad. Ahora él elige para uno de esos vinos el nombre de su otro gran amor, Teresa Rivero, una mujer sólida y fuerte, con temperamento y carácter y al mismo tiempo delicada, elegante y grande en sus virtudes, muy semejante, por tanto a los vinos que se crían en esta tierra”. 

“Me ha hecho mucha ilusión”
Tener una manzanilla con su nombre es algo que “me hace mucha ilusión, porque a pesar de que no entiendo de vino, sé que es una gran pasión de mi marido que siempre le ha gustado este mundo”, decía Teresa Rivero en la presentación de este caldo.
Y es que trabajar por Jerez es uno de los objetivos de la familia Ruiz-Mateos “como mi pueblo no hay nada. Nosotros somos dos jerezanos que siempre presumimos de donde somos”.
Y es que tuvo palabras de amor hacia su marido. “Primero quiso que el estadio de fútbol del Rayo Vallecano tuviera mi nombre, y así fue. Después, la fundación Teresa Rivero en Jerez que también hace muchas actividades culturales y sociales y ahora esta manzanilla, por lo que es muy importante para mi”.

reglajimenez@gmail.com

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