Lo que falta ahora es ponerle nombre a esa mascota electa, algo que se va a hacer sondeando a los colegios de la ciudad, con lo que la imagen plástica del evento tendrá identidad propia y comenzará a representar a uno de los acontecimientos principales del Bicentenario de las Cortes, al menos en lo que se refiere al plano deportivo y a pesar de que coincidan con el inicio del Mundial de Fútbol de Sudáfrica.
El alcalde de San Fernando, Manuel de Bernardo, mostró ayer su satisfacción por la elección, al tratarse de un animal que ha tenido mucho que ver con el trabajo cotidiano de la ciudad en las salinas, en otro tiempo una de las principales actividades de La Isla.
La obra de Cruz Martín y Andreína Scanú, ambas sevillanas, no ha estado exenta de polémica en los foros de las versiones digitales de los periódicos, habida cuenta de que se ha encontrado, al menos en el concepto, demasiadas similitudes con otra mascota directamente relacionada con el Bicentenario, como es la de la Asociación Guardia Salinera Isleña.
La coincidencia, vista por un profano, se limita al animal y queda para los especialistas si se dan otras similitudes que entren en lo estrictamente técnico.
