La barriada España, en alerta

Los vecinos de la barriada España, sobre todo los que viven en las calles Antonio Machado y García Lorca están atravesando una situación que ya se les hace “insostenible”. Balcones que se caen, techos que se vienen abajo y, sobre todo, los continuos problemas que surgen en torno a los solares que han dejado los derribos de las casitas bajas y del colegio Carola Ribed, son algunas de las principales preocupaciones a las que tienen que enfrentarse a diario.

Encima, según cuenta un grupo de vecinos que ha decidido movilizarse para reclamar una solución a su situación, no cuentan con el apoyo de la Asociación de Vecinos Beduinos, que “lo único que hacen es callarnos la boca porque les han prometido que les van a dar un local nuevo”.

Según cuenta el portavoz de estos vecinos de la zona conocida como ‘el Avecrem’, la infravivienda es una realidad en muchos de los bloques de este barrio. Comenta que en las últimas semanas se han caído varios balcones, lo que ha provocado incluso haya habido que acordonar algunas zonas ante el peligro de que se produzcan nuevos desprendimientos.

Y no queda ahí la cosa, porque incluso se ha caído el techo de un local comercial de la zona.

Casitas bajas
Pero la gota que, una vez más, ha colmado el vaso de la paciencia de estos vecinos es un nuevo incendio que el pasado lunes tuvo lugar en la zona de las casitas bajas. Actualmente están todas derribadas excepto cuatro que han sido las últimas en quedar deshabitadas. Allí se reúnen frecuentemente vagabundos o drogadictos.

Así, a las 21.45 del lunes, desde la calle Antonio Machado empezó a olerse el humo que luego destaparía un fuego que requirió para ser sofocado de la presencia de la Guardia Civil, la Policía y los Bomberos. Explican los vecinos que el lugar está lleno de muebles viejos, sofás y todo tipo de basura. Incluso en la zona apareció una bombona de butano, con el peligro que conllevaría una explosión para el barrio.

Y además, la cercanía de los coches aparcados junto a esta zona semi abandonada hace tremer a los vecinos que se produzca un incendio de consecuencias inimaginables, puesto que no es la primera vez que sucede un hecho de este tipo.

Acumulación de desperdicios
Los solares de las casitas bajas y el Carola Ribed llevan años convertidos en “auténticas escombreras”, que producen una gran suciedad en el barrio, además de atraer a las ratas y a todo tipo de insectos en un ambiente de absoluta insalubridad.

Una esperada transformación
El Ayuntamiento ya ha adjudicado de manera provisional la obra de construcción de otro tramo de la nueva avenida transversal de la ciudad que atravesará los dos solares que ahora están abandonados, con lo que se reurbanizará la zona.