Vienen buscando donantes. La presentación incluye la parición de las niñas de Zapatero. Algún taco poco disimulado complemente esta parte del repertorio. Su ilusión era cantar en el Falla. Bueno, misión cumplida. Ya es tradición eso de cumplir el sueño, así, sin más. Pocas voces y nada de afinación. Otro pasodoble a muchas cuestiones sociales. Como vampiresas confiesan haber preferido quedarse en Transilvania. Gracias a los cuplés y sobre todo el estribillo progresan en una actuación muy ¿ingeniosa?. Ya empieza el popurrí. Cuartetas y cuartetas con sangre de por medio. Muy esperado final.
Lo mejor
El forillo. Tan oscuro como el tema que representan y la negatividad del repertorio.
Lo peor
Cantando los pasodobles parece una comparsa. Muy sobrias actuando y demasiado tensas, sí señor.
El público
Un ambiente de diversión general brotó en la parte alta del teatro, no precisamente derivado de la chirigota. Se buscaba un desahogo.
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