El Tribunal Supremo (TS) ha rebajado la condena hasta imponer la pena mínima de prisión a un joven que participó en las labores de descarga de un alijo con 105 fardos de hachís en el litoral de Punta Entinas-Sabinar, en El Ejido.
El alto tribunal estima parcialmente el recurso de casación de la defensa y modifica el fallo que, en segunda instancia, le condenó a cuatro años y siete meses de cárcel por un delito contra la salud pública de extrema gravedad.
El Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) ya rebajó en apelación la pena impuesta inicialmente por la Audiencia Provincial de Almería, que ascendía a seis años de prisión.
La sentencia del Supremo, consultada por Europa Press, considera que no se ha tenido en cuenta a la hora de decidir si es aplicable la subida en uno o dos grados de la pena tipo para el delito, que la intervención del condenado fue la de descargador o "peón", lo que "debe tener repercusión en el tema de individualización penológica", según remarca.
"Resulta necesario distinguir entre el papel desempeñado por quienes aparecen como organizadores de la operación, o en unos niveles superiores y aquellos cuyo aporte se mueve en un estadio muy secundario: descargadores, vigilantes, si duda la conducta de quienes realizan las primeras", remarca.
Concluye el alto tribunal que procede imponer al recurrente por el delito contra la salud pública de extrema gravedad del artículo 370.3º del Código penal por la que viene condenado, la pena mínima de tres años y un día de prisión, manteniendo el resto de los pronunciamientos de la sentencia de instancia como el pago de multa de sendas multas de 10 y 15 millones de euros.
Según se recoge como probado, el condenado, con conocimiento de que llegaba una embarcación transportando en su interior fardos de cannabis, junto con otros individuos no identificados, se trasladó el día 13 de abril de 2020,a la playa de Punta Entinas-Sabinar de localidad de El Ejido, para recepcionar e introducir cannabis en la península.
Sobre las 23,17 horas en la referida playa a la que había llegado una embarcación de fibra semirrígida con tres motores, y de gran potencia a la costa, comenzó a realizar tareas de descarga de 105 fardos, para introducirlos en el camión.
Los 105 fardos contenían una sustancia, que una vez pegada y analizada resultó ser resina de cannabis y tener un peso de 3.045.157,0 gramos con un THC oscilante de 17,91 a 48,77 por ciento y con valor en el marcado ilícito al por mayor de 5.113.829,00 euros.