La Guardia Civil ha detenido en Melilla a un marroquí de 51 años residente en Murcia cuando pretendía viajar en barco a Málaga con 260 bellotas de hachís en el interior de barras de pan simulando ser bocadillos para almorzar.
Según ha informado un portavoz de la Comandancia melillense, la actuación ha tenido lugar la noche del 22 de septiembre en el transcurso de los controles selectivos de los pasajeros que a pie accedían al buque con destino a Málaga, al percatarse el vigilante de seguridad privada de cierta anomalía de interés policial en el control previo de los equipajes al pasarlos por el escáner, advirtiendo a la Guardia Civil de ello, que procedió a su apertura y registro en lugar habilitado.
La misma fuente ha explicado que si bien en principio al abrir la maleta no se apreciaba nada de interés, la sagacidad del guardia civil actuante conllevó a la apertura de varios bocadillos que portaba su propietario envueltos en papel de aluminio, comprobando con sorpresa que su contenido eran bellotas que por su envoltura, color y olor se correspondía claramente con hachís.
Realizado el correspondiente análisis, la sustancia estupefaciente se corresponde por su alta concentración de su principio activo con polen de hachís, con un peso de dos kilogramos con ochocientos treinta gramos, distribuidos en 260 bellotas.
El pasajero detenido es un varón de 51 años, nacionalidad marroquí y con residencia legal en la provincia de Murcia, lugar que podría ser el destino de la droga incautada, el cual ha pasado a disposición judicial como presunto autor de un delito contra la salud pública en su modalidad de tráfico de drogas.
