El precio de los carburantes ha visto cortada esta semana la tendencia bajista en la que se encontraba, después de seis caídas consecutivas en el caso del diésel, tras apuntarse una ligera subida.
En concreto, el precio medio del litro de gasóleo ha repuntado hasta los 1,029 euros, tras encarecerse un 0,087%, según datos del Boletín Petrolero de la Unión Europea recogidos por Europa Press.
Por su parte, el precio de la gasolina, que en su caso ya la pasada semana registró un ligero descenso, ha caído un 0,017%, para situarse en los 1,162 euros el litro.
A pesar de esta subida, los carburantes siguen confirmando la estabilización en sus precios, después de la tendencia al alza que vivieron a lo largo del periodo estival, con incrementos desde el pasado mes de mayo, cuando cayó a mínimos por el desplome registrado durante el confinamiento por el coronavirus.
A pesar de esta estabilización de las últimas semanas, el litro de gasolina todavía se mantiene en torno a un 8% más caro frente a esos mínimos de mayo, mientras que en el caso del gasóleo su precio es más de un 5% superior.
No obstante, la gasolina sigue estando más barata en España respecto a la media de la Unión Europea (UE) y la zona euro, donde el litro cuesta 1,272 euros y 1,318 euros, respectivamente, al mismo tiempo que el litro de gasóleo cuesta de media 1,106 euros en la UE y 1,125 euros en la eurozona.
El menor nivel de precios finales con respecto a los países del entorno se debe a que España, pese a las subidas del IVA, a los mayores impuestos y a los gravámenes al biodiésel, sigue contando con una menor presión fiscal, en general, que la media comunitaria.