Isi Ros tira del carro del recreativismo y se pudo comprobar en el último partido del Decano, en el que por fin logró la victoria ante el Sevilla Atlético y rompió una nefasta racha de nueve jornadas sin conocer la victoria.
El interior murciano de 24 años, cedido esta campaña por el Alcorcón al conjunto albiazul, no siempre ha tenido a la afición de su parte debido a su individualismo, pero está claro que es un jugador desequilibrante para la categoría y si está enchufado, es capaz de ganar él solo un encuentro como ocurrió en la Ciudad Deportiva hispalense, donde hizo dos goles, uno de ellos de bandera y que lo firmaría hasta el mismísimo Leo Messi, y un tercero en el que asistió a Rubén Cruz.
Diferente
Isi Ros es un jugador diferente y un extremo zurdo de los que se cotizan en el fútbol actual. Vertical, que no se arruga, que no para de encarar y aunque en ocasiones se le puede tildar de demasiado individualista, si es capaz de leer las jugadas, no hay defensa que pueda pararlo cuando está en carrera. Su resurgir después de varias semanas en el banquillo ha sido fundamental para que el Recreativo despierte, aunque ahora debe tener su continuidad y sobre todo el complemento de sus compañeros, porque todos los partidos no van a depender de que él esté más o menos acertado.
Ante el Cádiz B este próximo sábado se verá sin duda a un Isi Ros muy motivado y con ganas de demostrar también en Huelva y ante su afición que puede ser un jugador que marque las diferencias en la categoría. La grada seguro que estará con él y a poco que el murciano le responda en el campo con su fútbol, tendrá mucho ganado el equipo de cara a la victoria ante el filial cadista.
