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“Hablar de red clientelar del PSOE es faltar a la inteligencia"

Jiménez Barrios lidera la candidatura del PSOE por la provincia, para la que defiende un modelo productivo en la industria, la agricultura y el turismo

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  • Manuel Jiménez Barrios -

¿Por qué un gaditano después de casi 40 años debe volver a votar el PSOE y no probar cómo le iría con otro partido?

—En primer lugar le diría que suena un poco raro que lo que vote la gente se le reproche a la gente. Si la gente ha decidido apoyar al PSOE por qué hay que reprochárselo. En Castilla León gobierna el PP 31 años y no les llama la atención, y lo mismo ocurre en Galicia. Los ciudadanos son libres de votar a quien quiera. En la provincia el análisis que hay que hacer es si en estos cuatro años se ha mejorado o no, si se han hecho cosas o no. Hay más centros educativos, hay más profesores, hay más centros sanitarios, hay más profesionales sanitarios; los hay, y en una época de crisis. De eso hay que hablar. Frente a comunidades que han cerrado hospitales, nosotros hemos abierto el de La Línea, hemos rescatado el de San Carlos, se ha abierto Radioterapia en Jerez, y de eso es de lo que hay que hablar. Queda mucha tarea por hacer, pero hemos hecho muchas cosas.

¿Qué contesta a los que dice que el PSOE sigue ganando porque tiene una red clientelar?

—Eso es faltarle a la inteligencia de la gente. ¿De verdad cree que el PSOE tiene una red clientelar que llega a 8,5 millones de habitantes?. El PSOE lo que tiene delante es una oposición que da por perdida a Andalucía. Si el PSOE gobierna es porque la gente lo ha querido. La pregunta siguiente es ¿por qué no han votado al PP durante 37 años? Lo de la red clientelar forma parte del imaginario que han construido los que no han sido capaces de convencer a los ciudadanos en todo este tiempo.

En el tema de economía y empleo les critican que han despilfarrado millones de euros de fondos europeos que no han servido para nada

—Los fondos europeos han permitido que pasemos por autovías, aeropuertos, que tengamos cuatro Campus. Y en educación estamos inmersos con la formación dual gracias a fondos europeos, lo que permite que la empresa y Educación se pongan de acuerdo para que los alumnos hagan prácticas en las empresas. Invirtiendo en investigación, en innovación, en ciencia y en conocimiento. Teníamos más de 222.000 parados hace cinco años. Pero ese debate también es extraño, porque quién crea el empleo. La administración lo que debe poner son las medidas para facilitar la creación de empleo a través de las empresas. Y en la provincia tenemos el principal puerto de España y quinto de Europa, dos autopistas, una autovía que cicatriza la provincia, dos parques tecnológicos, cuatro campus, un aeropuerto... Lo que hay que hacer es atraer a más empresas  y que las que tenemos ganen tamaño. 

Pero reconozca que ha habido planes de empleo que han fracasado y que la formación profesional es insuficiente...

—Es cierto, y hay que hacer autocrítica, porque si no no se avanza. Pero a algunos se les olvida que a causa de la situación de crisis hemos tenido que sostener los servicios públicos a pulmón, donde la Junta no ha recibido la financiación adecuada. Si decimos que faltan 4.000 millones de euros anuales para la financiación de Andalucía, es que no hemos podido hacer lo que tendríamos que haber hecho con esos 4.000 millones. Las mayores ofertas públicas en sanidad, educación y dependencia de toda España se están produciendo en Andalucía. Si tenemos 30.000 millones de presupuesto y la sanidad se lleva 6.500 millones y la educación 8.000 millones, más dependencia y el resto de servicios, pues resulta que tenemos el presupuesto ya agotado. Si tuviéramos esos 4.000 millones de euros no tendríamos que haber estado haciendo tantos esfuerzos a pulmón.

 

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¿Cree que Ciudadanos podrá mantener tras el 2 de diciembre que sus votos no servirán para que el PSOE siga gobernando en Andalucía?

—Eso la reflexión inicial que suscita es que Susana Díaz y el PSOE van a ganar las elecciones. La pregunta siguiente es evidente: ¿y durante los tres últimos años y medio dónde han estado? Hemos negociado los presupuestos, acuerdo de investidura, acuerdos puntuales, presumen de haber resuelto los asuntos que ellos veían clave para Andalucía. Es decir, se han mostrado útiles para la política en Andalucía frente a la inutilidad del PP. Y ahora, a un mes de las elecciones, descubren que los socialistas no son de fiar. Eso no se lo cree nadie. Eso le quita credibilidad. Ciudadanos tiene ahora mismo un problema, y es el duelo al sol entre Rivera y Casado para ver quién se queda con la derecha en España. Y Rivera ordena a Juan Marín que eso de ser útiles a la política de la gobernanza no es posible. Y eso no tiene credibilidad ninguna y obedece a la táctica política del momento.

¿Han estado cómodos con ellos como socios de investidura?

—Eso también me sorprende, porque la derecha decía que en España hacía falta diálogo para el acuerdo, y en Andalucía el PSOE ha sido capaz de llegar a acuerdos con los andalucistas en su día, con IU y ahora con Ciudadanos. Eso significa que los votos de los ciudadanos deben servir para el acuerdo y para el diálogo. Lo que están provocando con la actitud de que su voto no servirá para que haya gobierno, es el que el ciudadano se pregunte si con esa postura lo que nos encaminamos es al desgobierno; y Andalucía ha tenido una estabilidad muy importante que hay que preservar como su gran valor, por seguridad, confianza, posibilidad de presupuesto... Y para decir que su voto no vale para formar gobierno, habrá que preguntarse si merece la pena darle su voto.

Para un pacto, además de Ciudadanos, está Adelante Andalucía, que ponen como línea roja no pactar con el PSOE, pero también impedir un gobierno de PP y Ciudadanos.

—Vaya galimatías.

Sí, pero Adelante Andalucía dice además que la Junta debe ser la brújula de Andalucía, crear un banco público y recuperar el impuesto de sucesiones. ¿Cómo lo ve?

—Pero si a través de la Agencia Idea ya tenemos la posibilidad de prestar 1.200 millones de euros a las empresas. Son cosas complicadas de entender, como que presenten una candidatura con presidenta y vicepresidente, como si esto fueran las elecciones de EEUU. Lo que hay que preguntarle es dónde ha estado en los grandes asuntos de la provincia. Cuando hubo un problema de defensa de la sanidad pública, no los sentimos cerca, cuando el problema de las corbetas, tampoco los sentimos cerca. Esas son las cuestiones que hay que plantearle a la confluencia. 

¿Puede tardar el que haya acuerdo de gobierno teniendo a las puertas las municipales y que nadie se quiera hacer la foto?

—Todo es tacticismo. Usted dice, a las puertas de las municipales nadie se querrá hacer la foto. Pero qué foto. En función de los resultados electorales, quien tenga la mayoría de votos debería poder gobernar y que desde la oposición se le fiscalice ese gobierno. Eso es lo que hay que hacer. Ahora resulta que hemos inventado una nueva fórmula, y en precampaña ya decimos que mis votos no van a servir para que se forme gobierno. Eso no se lo cree nadie, y eso le quita credibilidad a la política. A la responsable de la confluencia le hemos escuchado decir, con los socialistas "ni muerta", y ahora dice que no vamos a dejar pasar a la derecha. Lo que hay es que facilitar que se pueda gobernar con nadie. Nosotros decimos que no queremos pactar con nadie, lo que queremos es que los ciudadanos nos den una mayoría suficiente para que todo el mundo se convenza de que tienen que arrimar el hombro. Vamos a abrir negociaciones con el que quiera en beneficio de Andalucía. De partida decir lo contrario es decir que su voto no vale para nada.

¿Qué le ofrece el PSOE a la provincia de Cádiz para los próximos cuatro años?

—Hemos diseñado en estos tres años iniciativas para un proyecto común para la provincia. Hay un modelo productivo basado en una gran industria en un momento de crisis que hay que resolver, con dos grandes polígonos industriales, en el Campo de Gibraltar y en la Bahía, que precisan de la investigación y de la innovación para tener valor añadido;  de ahí el Centro de Fabricación Avanzada, o el centro del Olivillo, los centros de transformación o la formación. Por otro lado, los temas de agricultura, que junto con la industria y el turismo conforman el modelo productivo de la provincia que hay que seguir mejorando para que ayude a crear más y mejor empleo. Y eso se consigue con incentivos para las empresas, para que la innovación y la investigación se fije en la provincia. En este momento se está estudiando con el Instituto de Biomedicina de Cádiz, con 8 millones de euros de inversión, para conseguir patentes para la provincia, pero nadie quiere hablar de eso. Como cuando se pide que hay que conseguir que el turismo de la provincia sea de calidad; pero si ya lo es, lo que hay que conseguir es que la estacionalidad sea más grande.

¿El PSOE no está agotado en Andalucía?

—¿Usted me ve a mí agotado?

Usted no es el PSOE.

—Me he permitido la licencia de la broma, porque la gente que milita en el PSOE es el reflejo de nuestra lista en la provincia, hay experiencia y juventud. El PSOE ha sido capaz de tomar las decisiones políticas necesarias en función de la situación política del momento, y eso no todo el mundo puede decirlo. El PP sufre ahora una crisis convulsa, Ciudadanos no tiene autonomía, y la confluencia anda con sus problemas. Además, si las encuestas dan al PSOE como ganador, la pregunta no es ésa, sino que el PSOE es el partido ligado a los intereses de su tierra y el que le interesa a la gente.

Dice Juanma Moreno que si él es presidente va a bonificar el peaje y que habrá la mayor bajada de impuestos de la historia.

—Creo que el PP tiene en este momento una dificultad muy grande para que sus iniciativas políticas calen en los ciudadanos y necesita hacer estas cosas de campanadas, porque después de gobernar siete años en España, y haber podido eliminar el impuesto de sucesiones, ahora viene y dice que hará la mayor bajada de impuestos, pero no dice cómo va a mantener la prestación de los servicios públicos tras esa bajada; y ahí está el truco, porque si se bajan los impuestos y no se dice de dónde vendrán los ingresos, al final hay que recurrir a las privatizaciones. Y lo de la autopista es de campeonato. Si ya hay fecha de finalización, ¿con el dinero de la gente quiere que se pague ahora lo que queda de peaje? Eso da el grado de nerviosismo del PP, porque el auténtico referéndum que se va a celebrar en Andalucía es saber si el señor Moreno Bonilla seguirá o no tras las elecciones.

El empleo es la columna vertebral de los partidos. Ha habido muchos planes de empleo en la provincia, ¿cuál es la receta del PSOE para atraer a las empresas que tienen que crear el empleo?

—Aparte de la ITI, que tiene como objetivo fijar el modelo productivo, hay otras iniciativas fundamentales, para centralizar los apoyos. Y un elemento fundamental es Zona Franca. No entiendo por qué se extiende a lugares recónditos para crear centros de negocios, en vez de coger los diez millones de metros de suelo productivo de toda la Bahía se pongan al servicio de un proyecto y que lo gestione con fondos europeos e incentivos fiscales. De eso nos gustaría discutir para que vengan más empresas y las que hay ganen en tamaño,  si se cuenta con suelo e infraestructuras.

Con respecto a Zona Franca, ¿se va a desarrollar ese proyecto, ahora que ustedes están la frente del Consorcio?

—Para empezar ya nos hemos puesto de acuerdo para la desaparición de aquel proyecto fallido llamado Aletas, con dos sentencias judiciales en contra, y poner en marcha Lógica, de manera que el pequeño suelo industrial con el que cuenta, que es a lo que se ha reducido la opción original, juntarlo con el resto de esos diez millones de metros productivos para ampliar la Zona Franca a sus límites, y eso tendría unos incentivos extraordinarios. Eso es lo que hay que hacer, y en eso estamos inmersos. Entiendo que los ciudadanos sean escépticos. Pero este plan tiene una ventaja, ya que hay que dar resultado a la Unión Europea, puesto que van para el incentivo en la innovación y la creación de empleo. Por eso no podemos desaprovechar esta oportunidad. Creo que la estamos aprovechando en complicidad con sindicatos y empresarios, pero además con un detalle importante: no poniendo el dinero para que vengan las empresas, sino que si la empresa viene y se la juega, la administración también lo pone y se arriesga igualmente. Si fracasamos, fracasamos todos, y si acierta, acierta el empresario que es el que crea empleo.

¿Qué opina, y diga si lamenta, que nuestra comunidad salga de nuevo en campaña para lo negativo, la anécdota, los tópicos, los prejuicios?

—Si coges la provincia de Cádiz, tenemos cuatro campus universitarios, pero eso no vende en los periódicos. Es más fácil hablar de otros temas. Todos contribuimos a esa mala imagen, no solo la administración. Tenemos referentes internacionales en la Universidad de Cádiz, pero eso no es noticia. De Despeñaperros para arriba hay gente que no le interesa conocer esa realidad. Eso no lo quieren entender, pero sí lo entienden, lo que pasa es que el PP da por descontado que esta tierra no le interesa. Todo lo que somos capaces de hacer entre todos, deberíamos saber proyectarlo al exterior entre todos. La verdad es que ya ha llegado el momento de dar un puñetazo encima de la mesa. Hace unas semanas vinimos al Puerto a la presentación del Hyperloop, que es un modelo de referencia de investigación en el mundo, y algunos se permiten la gracia de decir que eso funcionará o no funcionará. Eso es con lo que hay que acabar. Y no es solo responsabilidad de los políticos, sino de todos.

 

*Entrevista emitida en el espacio A Compás de 7TV con la participación de Mauricio García, Almudena del Campo y Paco Sánchez Múgica.

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