CSIF Sanidad Málaga se ha movilizado este jueves junto al colectivo de médicos de la unidad de Urgencias del Hospital Civil en protesta por el caos organizativo que impera en la unidad, derivado de una nefasta gestión. Este sindicato exige a la gerencia del Hospital Regional, del que depende, que asuma las responsabilidades correspondientes por la situación, que se repite cada verano y que pone en riesgo la salud laboral de la plantilla y la asistencia sanitaria a la población.
A la merma de personal acumulada durante los últimos años en la plantilla de médicos de urgencias se han vuelto a sumar este verano los problemas derivados de la deficiente gestión en materia de recursos humanos. CSIF denuncia que, si no se produce un refuerzo de personal, se quedarán sin cubrir alrededor de 1.700 horas este verano, que recaerán sobre los profesionales que queden, que tendrán que asumir la sobrecarga. Actualmente hay cuatro descubiertos en una plantilla de nueve profesionales por turno, una situación que puede empeorar en las próximas semanas si no se produce un refuerzo.
Ya el pasado mes de mayo CSIF reclamó sin éxito a la gerencia la previsión de cobertura para el verano. Casi dos meses después, la realidad demuestra la falta de planificación, ya que no hay personal suficiente para cubrir las vacantes por vacaciones de los profesionales. No es adecuada la promesa de la Administración de que continuarála búsqueda de personal médico para realizar las contrataciones por las vacaciones, que, de momento tendrán que cubrirse entre los propios médicos de plantilla.
CSIF denuncia que la falta de previsión y organización ha derivado en un problema que se repite cada año, que es evitable y por el que nadie asume responsabilidades, al tiempo que exige respuestas ante la mala gestión, y soluciones; las urgencias no se pueden cerrar. Este sindicato advierte de que la situación ocasiona graves problemas en la asistencia sanitaria a la población malagueña, así como en la salud y seguridad laboral de los profesionales.
