La playa de La Muralla se ha convertido en referente promocional y parte de la publicidad que realiza el Ayuntamiento, conformado por PSOE e Izquierda Unida, formando parte de una valla turística colocada en la antigua N-IV, antes de llegar al parque de bomberos (en dirección Jerez de la Frontera-Cádiz), pero en cambio no obtiene los “mimos” ni la atención necesarias para que se siga conservando en pie. De hecho, la Subdelegación del Gobierno anunció en el mes de octubre de 2017 que esta fortaleza y otra ubicada en la vecina ciudad de Sanlúcar de Barrameda, serían objeto de proyectos de rehabilitación que les devolverían su esplendor y su posibilidad de continuar en pie para que la ciudadanía y turistas puedan seguir disfrutando de las mismas.
Pero ni la Subdelegación del Gobierno, dependiente del Gobierno central, ni la Junta de Andalucía por sus preceptos de Bien de Interés Cultural (BIC), ni el propio Ayuntamiento, se han encargado de cuidar esta antigua fortaleza, que sirviera en la lucha contra los franceses. Los portuenses, preguntados por este medio, intuyen que si La Muralla protagoniza parte de esta valla promocional, se ha convertido en uno de “los orgullos” municipales, y por tanto, también consideran que las administraciones competentes tendrían “que ponerse manos a la obra para que La Muralla no se caiga a pedazos, como ya está ocurriendo”, sobre todo desde que hace unos meses el temporal azotara a la ciudad fuertemente y algunas de las piedras que conforman esta fortaleza comenzaran a desplomarse, a pesar de la negativa expresada por varios dirigentes municipales. Pero los propios portuenses han podido comprobar y confirman que es cierto que se han caído algunas de estas piedras, lo que supone peligro no solo para los ciudadanos y usuarios de la playa, sino para la propia fortaleza.
Además, Milagros M. considera que “si han colocado a La Muralla, junto a Puerto Sherry y otra playa, que puede ser cualquiera de las que tenemos, en la valla, se está dando de lado al Vaporcito”, que ha sido, durante años, la marca promocional de El Puerto. Pero desde que el 30 de agosto de 2011 se hundiera, en pleno gobierno de Enrique Moresco por el Partido Popular, “no se han hecho esfuerzos para que el Vaporcito no terminara como está, esquelético perdido y abandonado en un varadero, sin que tenga futuro. No lo tuvo entonces, no lo va a tener ahora”, explica.
Y es consecuencia de la falta de actuación por parte de Partido Popular y PSOE, porque en ningún momento se ha hecho “nada para que se pudiera arreglar esta circunstancia”. Por tanto, los portuenses consideran que el Vaporcito “se ha olvidado, y ya no pinta nada para El Puerto, excepto para los nostálgicos, que seguimos pensando que es el emblema turístico de El Puerto”, y que ha formado parte del Carnaval, tanto de la ciudad como de Cádiz, del poemario local y de la memoria histórica. Un Vapor que se encuentra estancado en un varadero, consumiéndose día a día y que no se ha conseguido mover a una rotonda o a algún lugar visible, para que forme parte de la cultura portuense. “Pero para eso habría que adecentarlo y no dejar que se siga pudriendo y destruyéndose, y parece que no hay intención. El alcalde, David de la Encina, tampoco va a hacer nada por el Vapor, y los portuenses, por mucho que pataleemos, no podemos hacer que las administraciones actúen”, lamenta M. M.
Pero los ciudadanos se refieren a otros referentes turísticos o históricos como puedan ser el parque de la Victoria o el parque Calderón. La rehabilitación del primero citado ha sido una lucha durante años por parte de los vecinos de la Zona Norte, pero ciertamente el resultado no fue del agrado de los ciudadanos, que además reivindican que no se ha cuidado este parque decimonónico como se merece.
La Puntilla, un clásico bastante olvidado
La playa de La Puntilla parece no contar, o esa es la sensación que tienen los usuarios de esta emblemática playa, a pesar de ser parte del poemario y las canciones o coplas de Carnaval. Además, exigen que se retire el barco que llegó con el temporal hace meses.
El Castillo de San Marcos, en manos privadas
Los propios portuenses no entienden por qué el Castillo de San Marcos, uno de los monumentos más emblemáticos de la ciudad, está en manos privadas y no públicas, ya que tendría que ser gestionado por el Ayuntamiento y revertir en la población.
Referentes que se van estropeando sin solución
Algunos referentes, como pueda ser el parque de la Paz para el ocio de los menores de la casa, se están estropeando sin solución por parte municipal. La zona de juegos tiene muchos problemas y en aumento, a pesar de la cantidad de usuarios que tiene.
El paseo peatonal sigue recibiendo halagos
El paseo peatonal que une Fuentebravía y Las Redes a pie de playa sigue recibiendo halagos de parte de los usuarios. Los deportistas, pero también quien quiere acudir a la playa, se deshacen en buenas palabras para esta infraestructura.
