Las Cruces de Mayo llenaron de contenido principalmente el casco antiguo de Arcos durante el fin de semana, aunque también se instalaron algunas en otros puntos de la ciudad como por ejemplo en el centro social de El Santiscal, Barrio Bajo, barriada de la Paz, Junta de los Ríos, Las Palomas o en la conocida Venta Calderón. La inauguración de la ruta oficial tuvo lugar la tarde del sábado con las palabras de bienvenida del equipo de Gobierno. El público, que se contó por centenares, pudo disfrutar no solo de las magníficas 35 cruces instaladas por vecinos, asociaciones y hermandades, sino, además, de la divertida obra teatral representada por Entretelas Teatro en la capilla de La Misericordia, este año un sainete original de Salvador Pérez Salas bajo el título de ‘Siempre habrá una cruz’, que trató temas tan actuales como la polémica en torno a las pensiones. A todo, los distintos monumentos florales no pararon de recibir visitas, como por ejemplo la bella cruz instalada en la Cuesta de Belén o la que montan desde hace más de dos décadas las vecinas de la calle Marqués de Torresoto.
Pero la atención también se centró, como hecho novedoso, en la procesión religiosa que partió de la iglesia de San Juan de Dios con la organización de la cofradía de la Vera Cruz, aunque en esta ocasión no fueron sus costaleros habituales, sino un grupo de jóvenes cofrades el que cargó en el paso de La Milagrosa una gran cruz que simboliza el culto a Cristo.
La idea partió del grupo joven de la hermanad, que ha logrado reunir a 45 costaleros de distintas cofradías arcenses cuyas edades oscilan entre los 14 y 18 años. Estuvieron dirigidos por los también jóvenes capataces Francisco Ruiz y Miguel Roldán. La procesión estuvo acompañada de sus correspondientes acólitos y de la banda municipal de música Vicente Gómez Zarzuela.
El recorrido de las Cruces de Mayo estuvo ambientado además por una charanga musical y contó con la presencia, una vez más, de las molineras y el corregidor del último Carnaval.
Así lo vio el delegado de Fiestas
Posteriormente, el delegado municipal de Fiestas, Raúl Lozano, ha querido agradecer a vecinos y colectivos (hermandades, centros de mayores, asociaciones parroquiales, de mujeres e incluso Ampas) su entrega para montar las cruces, que han contado con más de 24.000 tallos de flores. En cuanto al impacto económico de las Cruces de Mayo, Lozano ha destacado la ocupación del cien por cien en los establecimientos hoteleros gracias sobre todo a la afluencia de aficionados al Gran Premio de Jerez. El 85 por ciento de los hoteles ha tenido ocupado el cien por cien de sus habitaciones, mientras que tres hoteles locales han alcanzado un 95 por ciento. En este sentido, el delegado señala que esta ocupación es para “congratularnos porque revierte el dinero en los establecimientos de Arcos”.
Asimismo, y dentro del apartado de novedades, ha destacado el entelado en las calles Deán Espinosa y Escribanos porque este detalle estético ha embellecido aún más, si cabe, el entorno de las Cruces de Mayo. Por último, ha reseñado la buena aceptación que las Cruces han tenido sobre el turismo, que ha encontrado en esta época del año una ocasión para visitar la ciudad, así como la aportación de la hermandad de la Vera Cruz y de Entretelas Teatro para engrandecer los actos.