Rodrigo L.C., soldado del Ejército del Aire, fue expulsado de las Fuerzas Armadas en abril de 2006 tras haber dado positivo en tres análisis de orina que confirmaban la ingesta de cannabis y cocaína, ya que, según el régimen militar, "embriagarse o consumir drogas tóxicas, estupefacientes o sustancias psicotrópicas con habitualidad" constituye una "falta muy grave".
La sentencia de la Sala Quinta de lo Militar del TS, fechada el pasado 12 de junio, recuerda que el régimen disciplinario de las Fuerzas Armadas establece que sólo existe "habitualidad" cuando se dan tres o más episodios de ingesta de estas sustancias.
Aunque en principio los análisis de orina del acusado dieron positivo en las tres ocasiones, el Tribunal Supremo sólo ha considerado probados dos episodios de consumo de drogas, ya que el resultado de una de las muestras -que dio positivo por ingesta de cocaína- no es válido al no haberse confirmado la presencia de cannabis por volumen insuficiente de orina.
Además, el TS no da validez a este análisis al considerar que la Administración vulneró el derecho del soldado a su intimidad, ya que la ley no contempla la realización de pruebas obligatorias para detectar el consumo de estupefacientes por parte de los militares, y Rodrigo L.C. no dio su consentimiento.
El Supremo ha estimado, por tanto, el recurso del acusado y ha anulado la expulsión acordada por el Ministerio de Defensa el 4 de abril de 2006.