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El comedor Sol y Vida espera cinco meses después terminar sus obras

Levantemos declara que "Antonio Fernández de querer justificar lo injustificable pues más que dar confianza al colectivo afectado lo que crea es incredulidad"

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  • Imagen de archivo -

La formación recuerda “la pregunta formulada por Levantemos en el Pleno de septiembre sobre la situación del comedor Sol y Vida venía fundada en que desde nuestra salida del Gobierno nada más se ha sabido de un asunto que se dejó prácticamente cerrado”.

Afirma Levantemos que “pocos meses después de llegar a la concejalía de Bienestar Social, la asociación ADRA nos trasladó la urgente necesidad de utilizar un espacio municipal, que se encontraba vacío, para guardar bastantes kilos de comida para su posterior reparto, se cerró el acuerdo de que una vez repartida esa comida el uso del local volvía a ser municipal y quedaría disponible para darle el uso más apropiado al local con las características que tenía. Una vez repartidos los kilos de comida, la asociación recibió otro camión cargado”.

El comedor “en este periodo fueron varias las conversaciones mantenidas entre José Antonio Oliva y Carmen Lara, también fueron varias las reuniones celebradas en la concejalía de Bienestar con la asociación ADRA para intentar buscar soluciones. Por un lado el local que esta usando ADRA tiene unas características apropiadas para ser usado como comedor y poder atender a las más de 70 personas diarias que atiende Sol y Vida, y por otro lado la encomiable labor que realiza ADRA puede ser desarrollada en un local que no necesita esas características tan específicas”.

“En el mes de mayo, en la última reunión mantenida entre el área de Bienestar Social y ADRA se cerró un acuerdo en el que la Asociación se comprometió a buscar un local alternativo y desalojar el que usan habitualmente en escaso un mes tras la reunión”.

Por último, declara que “Levantemos dejó la gestión hecha, solo a la espera de terminar de cerrar el acuerdo, ya más que consolidado con ADRA, para poder entregar el uso del local a Sol y Vida, sin embargo, desde nuestra expulsión del gobierno parece que hemos entrado en una paralización de todos los asuntos que estábamos gestionando hasta el punto de tardar meses en volver a retomarlos. Por ello, lamentamos el intento del Sr. Antonio Fernández de querer justificar lo injustificable pues más que dar confianza al colectivo afectado lo que crea es incredulidad y escepticismos pues no tiene lógica ninguna el que se vaya a tardar más de medio año en ejecutar algo que ya estaba acordado”.

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