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Viernes 10/05/2024  

Andalucía

Arenas tacha de "nefasta" la reunión y Valderas alerta ante la "escasa claridad"

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El presidente del PP-A, Javier Arenas, calificó ayer de "nefasta" la entrevista mantenida entre los presidentes del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y de la Junta, José Antonio Griñán, y criticó que "el nivel de compromiso con Andalucía ha sido cero".


En declaraciones a Efe, Arenas consideró que esa falta de compromiso con Andalucía "pone de manifiesto que estamos en la etapa de menos peso político de Andalucía en toda nuestra historia autonómica", y dijo que se estaría "ante la noche y el día" si se compara esta entrevista y las "afirmaciones y compromisos concretos" hechos por Zapatero con Cataluña.


Para el presidente del PP-A, Griñán ha ido a la Moncloa "sin exigencia y se ha vuelto cargado de sumisión", y "más parece que haya ido a defenderse del señor Zapatero que a defender los intereses de Andalucía", y como ejemplo de ello ha resaltado que el Gobierno de Rodríguez Zapatero "ni siquiera ha querido comparecer después de la entrevista".


Afirmó que Griñán "ha aceptado que Andalucía no sea la comunidad que más gane con el nuevo sistema de financiación autonómica" y criticó que "decirnos que se nos garantizan más inversiones que a otras comunidades es una broma de mal gusto: eso faltaba, con ocho millones de habitantes", sentenció.


"El problema es que luego las inversiones no se ejecutan en Andalucía", denunció Arenas, quien, de este modo, aseguró que "800 millones de euros han dejado de ejecutarse" en la comunidad andaluza en 2007 y 2008, con lo que "el compromiso queda en nada".


Según el líder del PP-A, "el millón de parados que hay en Andalucía han sido los grandes ausentes de la conversación" entre los presidentes del Gobierno y de la Junta, y aseveró que "Griñán ha mentido porque seguro que han hablado de la deuda histórica y ha aceptado el pago parcial o total en solares".


También lamentó que ha sido "condenado el proyecto de ocho (trenes) AVE comunicando a las ocho provincias andaluzas" y recalcó que "mientras gobiernen los socialistas habrá tres AVE para tres provincias y cinco se quedan sin él".


Arenas anunció además que el grupo popular va a solicitar un debate en el Parlamento andaluz sobre esta "nefasta reunión", en la que, según él, "se demuestra que Griñán defiende el interés del PSOE sacrificando el interés general de Andalucía".


Sin claridad con la deuda histórica ni con el sistema de financiación

Por su parte, el coordinador general de IULV-CA, Diego Valderas, se mostró "preocupado" por la "escasa claridad" que, a su juicio, se ha producido en esa reunión, especialmente en lo que se refiere al cobro de la deuda histórica y al nuevo modelo de financiación autonómica, y consideró que el líder del Ejecutivo andaluz ha perdido la oportunidad de confirmar el compromiso del Gobierno central con Andalucía de pagar los 800 millones restantes de la deuda histórica en dinero "contante y sonante".


Si bien, sobre la financiación autonómica indicó que no se ha avanzado nada más de lo que ya se conocía, "que era la obligación de Griñán de hacer cumplir el Estatuto de Autonomía de Andalucía", cuando, a juicio de Valderas, se debería haber informado sobre los recursos de los que Andalucía va a disponer en el nuevo modelo de financiación autonómica.


Asimismo, opinó que Griñán no se ha mostrado "con firmeza" en la primera reunión que ha mantenido con el presidente del Gobierno "en lo que se refiere a la defensa de los intereses generales de Andalucía". "Esperaba bastante más de esta reunión, de la que ha destacado la ambigüedad y la incertidumbre", añadió.


Sobre la petición de Griñán al presidente del Ejecutivo central de las competencias sobre los chiringuitos de playa, a la que Zapatero no ha planteado inconvenientes, Valderas consideró "satisfactorio" este acuerdo y aseguró que "bienvenido sea". No obstante, consideró que Andalucía tiene que lograr el "mayor nivel de competencias", especialmente en materia ferroviaria. Además, aseguró que en las palabras de Griñán se atisbaba una "cierta renuncia al Corredor del Mediterráneo", concluyó.

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