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Los hermanos Rodríguez ponen voz al sentimiento costalero

Al alimón y en clave poética, los pregoneros narraron la pasión de Cristo y los sentimientos y emociones bajo un paso. Miguel Chamizo y Miguel Ángel Parra pusieron el toque flamenco

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Los hermanos Jesús y Miguel Rodríguez Rodríguez sorprendieron por la original puesta en escena de la última edición del Pregón del Costalero, celebrado la tarde del pasado domingo en el teatro Olivares Veas.

El pregón, organizado por la hermandad del Prendimiento, constó de tres partes distintas: una primera con los saludos de rigor, algo de crítica social y su particular encomienda a la Virgen de las Nieves; una segunda dedicada a la costalería, donde hicieron hincapié en sus hermandades (Tres Caídas, Veracruz, y Dulce Nombre), recordando anécdotas, a personas y compañeros idos..., e  invocando la unidad entre costaleros y hermandades, la mayor parte en verso. 
En la tercera y última parte del pregón, también al alimón, recitaron un auténtico sonetario dedicado a la hermandad del Prendimiento,  haciendo un recorrido por las calles que más les gustan de su cortejo.

Acompañaron a los pregoneros el guitarrista Miguel Chamizo -por soleá- y el cantaor Miguel Ángel Parra, que hizo una saeta, además de un grupo de viento y metal de la hermandad de las Tres Caídas. No faltaron reivindicaciones de diversa índole y sobre todo momentos emotivos, en su mayoría en verso.

Recitaron un poema que decía: “Por la puerta de Belén/ se derraman las miradas./ Se está derramando la tarde,/ ya se derramó la mañana./  No te derrames Guadalete/ tan deprisa en primavera,/ que se está derramando la luna./ Y está el Soberano en la Corredera./ ¡Derrama tú, las palabras capataz!/ ¡Derrama el alma Costalero!/ ¡Derrama Judas las monedas!/  ¡Derrama la cuerda militar!/ ¡Derrama María el Desconsuelo!/ ¡Derrama, costalero, la chicotá!”.

También dedicaron un bonito poema a la plaza Boticas: “ Quiero muy dulce la entrada/ en Boticas compañeros./ Que esto es un horno mercedario,/ chicotaíta de caramelo./ Las llamadas templaítas/ como cortadillos las quiero./ Amasando el tiempo despacito/ que huele a canela el costero./ Las luces de las farolas/ tienen el color de almíbar./ Cornetas de caracolas/ con la boca hecha agua./ Que estarán quemando los monaguillos/ si no las semillas de las amapolas”.
También tuvieron palabras en verso para Cristo: “Agonizando en la cruz/ siendo el hijo de Dios,/ fue el infame Pilatos/ quien tu sentencia firmó./ Agonizando en la cruz/ te sangraban las heridas/ mientras se oía el lamento/ de tu madre María./ Las espinas ensangrentadas,/ herido del corazón/ por una muerte anunciada/ sin la ayudita de Dios./  El aliento se enfriaba,/ la boca seca, sin agua/ y los perversos judíos/ sólo vinagre le daban./ Esperaba en su cruz./ Estaba muriendo de bueno,/ clemencia pedías tú/ sin ayudita del cielo./ Clemencia pedías tú./ Tu padre te contestaba:/ Hijo, este es tu destino,/ pensado y escrito estaba./  Divino tú padre mío/ que sufriste sin razón./  Te clavaron al madero/ siendo tú, el hijo de Dios./ Tu rostro impone moreno/ con tanta sangre y sudor./ Un verde olivo refleja/ año de muerte y pasión./  Las campanas repicando/ por la muerte de Jesús,/ que clavao está llorando/ con un rayito de luz./ La tierra tembló tres veces./ El cielo se oscureció./ Las flores se marchitaron/ junto al divino redentor./ Tu sangre caía pura,/ derrochaste todo tu amor./ Es tu corazón que aúna/ y a todos nos perdonó./ Lleva los labios entreabiertos,/ sus ojos semicerrados,/ pues hasta el último momento/ ofreció el perdón de los pecados./  El corazón lo llevas dentro, verlo a mi no me hace falta,/ mas sin duda el sufrimiento/ está impidiendo que lata./ Tu cabeza mira al suelo,/ son tus rizos los que hablan,/ están pidiendo consuelo./ Tus manitas enclavadas./ Tu vela de terciopelo,/ entramado de simbolismos./ Aroma del que no es nuevo / y sigue siendo sencillo./ Llenito de Angustias camina,/ llenito de historia viva./ Soleá llévatelo rápido, /que no sufra de agonía./ La corneta está esperando/ tocarte por bulería,/ martinete de mis pasos/ colorete de mi vida.

Los habituales detalles de agradecimiento de la hermandad del Prendimiento hacia los pregoneros cerraron la tarde cofrade en teatro Olivares Veas a golpe de verso.

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