Arenas y Griñán se volvieron a enzarzar en un debate sobre si el Gobierno andaluz está o no poniendo en marcha las reformas que necesita la comunidad andaluza para poner freno a la crisis económicos y al déficit con el que cuenta en determinadas políticas.
Ante las críticas de Arenas de que el Gobierno andaluz no pone en marcha reformas, el presidente de la Junta recordó que muchos de los asuntos planteados por el PP como reformas están recogidos en el documento con 41 medidas para luchar contra la crisis, al que, según recordó Griñán, este partido "dijo no" y al que dijo que les volvía a invitar para consensuar con el resto de partidos.
Recordó medidas recientes como la aprobación anteayer de la Ley del Derecho a la Vivienda, o el reciente acuerdo con los agentes sociales y las entidades financieras para dar salida al mercado del parque de vivienda que están sin vender; las ayudas el fomento del alquiler con opción de compra; y las destinadas a las rentas bajas.
De la misma forma, recordó medidas sobre las que Andalucía ha sido "pionera", entre ellas que haya sido la única comunidad que ha "complementado" el pacto local de empleo, con el Memta y el Proteja, por lo que afirmó que el andaluz "es un Gobierno que está gobernando".
Por su parte, Arenas, que advirtió al presidente de la Junta de que las reformas "son necesarias" para el futuro de los andaluces, propuesto a Griñán que ponga en marcha una docena de reformas que van desde la educación, a la vivienda, pasando por la industria, la justicia y el sector público.
"Usted ha asumido los 30 años de gestión del PSOE con todos sus incumplimientos y sus fracaso, y Andalucía necesita un impulso y reformas", señaló el líder del PP, quien reiteró que sin reformas en la comunidad autónoma "no hay futuro", y añadió que para poner en marcha estas reformas "el PP está dispuesto".
El presidente del PP-A, que indicó que apoyar los 41 puntos del documento del Gobierno solo supondría darle una "botella de oxigeno a promesas incumplidas", recordó a Griñán que se puede ser "socialista y conservador" porque cuando se antepone el mantener el poder a la transformación de la sociedad resulta "reaccionario".
Ni una reforma en el último mes
Tras advertir a Griñán que en el último mes "no ha habido ni una sola reforma", reprochó la política de vivienda de la Junta y señaló que el problema está en que el Gobierno andaluz ha pasado de las viviendas gratis a los que ganan menos de 3.000 euros a que sean los alcaldes "los que las paguen"
El dirigente popular aprovechó también la pregunta a Griñán para preguntarle, sin éxito en la respuesta, si va a aceptar que se creen comisiones de investigación sobre el caso de MercaSevilla y de la empresa Mina de Aguas Teñidas, algo que, en su opinión, será "la prueba de fuego" del compromiso de su Gobierno con la transparencia.
"Andalucía necesita reformas y transparencia, pero sobre todo necesita, de verdad, humildad y enterrar la soberbia como consecuencia de 30 años de gobierno", señaló el líder del PP-A.
El presidente de la Junta, que advirtió a Arenas de que los pactos benefician a los ciudadanos aunque puedan perjudicar al PP, reprochó a este partido que nunca acepten las propuestas novedosas pero al final "las terminan aceptando cuando ya no son ninguna novedad".
Respecto a las denuncias del PP de falta de austeridad, Griñán recordó que mientras su Gobierno ha reducido 17 direcciones generales en Galicia se han reducido nueve, y dijo que este no es "un problema de austeridad por austeridad sino de eficiencia".
Salario social
Por otra parte, el presidente de la Junta garantizó ayer el pago del salario social a todas aquellas personas que tengan reconocido este derecho y aseguró que las consignaciones presupuestarias en este asunto son "ampliables".
"Es una prestación reglada. Se gasta tanto como derechos se reconocen. No hay ningún problema", dijo el presidente andaluz en la sesión al control del Gobierno después de que el coordinador general de IULV-CA, Diego Valderas, le pidiera que multiplicara por ocho las cantidades reservadas al abono de las prestaciones sociales debido al incremento del número de parados.
Además, Valderas dijo que las partidas reservadas en los presupuestos a salario social carecen de "sensibilidad" y no son "realistas", al tiempo que explicó que suman menos del dinero que la Junta destina a mantener los vehículos oficiales o las obras de San Telmo.
Griñán rechazó poner una cifra al aumento de estas prestaciones porque, según dijo, la Junta garantiza el pago a todos aquellos que tengan reconocido este derecho.
El presidente explicó que los créditos reservados para el salario social son "ampliables", tal y como establece la Ley de Presupuestos, y apuntó que, de hecho, ya se está modificando.
Así, aseguró que 4 de cada 5 euros aumentados van destinados a políticas sociales, lo que ha supuesto más de 1.000 millones de euros.
Griñán aseguró que Andalucía es la comunidad que destina más dinero a las prestaciones sociales y ofrece algunas que no existen en otras comunidades, como la gratuidad de los libros de texto o la asistencia sanitaria bucodental.
Además, recordó que es la única región que complementa las ayudas otorgadas por el Gobierno central para los desempleados.
La Ley de Renta Básica
Por su parte, Valderas acusó al PSOE de dificultar la aprobación de la Ley de Renta Básica -que suplantará al salario social- y que viene recogida en el Estatuto de Autonomía y exigió a Griñán la entrada en vigor de esta norma -que para IU debe dotarse de 2.000 millones de euros- el 1 de enero de 2010.
Según Valderas, el PSOE se opuso en la anterior legislatura a la aprobación de una renta básica, mientras que en ésta se ha negado a la creación de un grupo de trabajo sobre este asunto, por lo que aseguró que los socialistas son los "responsables" de la falta de diálogo.
El presidente andaluz rechazó esta acusación y aseguró que la Ley de Renta Básica debe nacer del diálogo y el consenso de todos los grupos parlamentarios, por lo que su aprobación dependerá del "entendimiento" entre todos.
Sobre la posibilidad de ampliar la cobertura para quienes han agotado su prestación por desempleo y que, según los planes del Gobierno central, recaería en una responsabilidad compartida con las comunidades autónomas, el presidente andaluz apuntó que Andalucía está dispuesta a colaborar aunque primero hay que esperar a las directrices que se adopten en la reunión sectorial entre Gobierno y comunidades para evitar "distorsiones".
El líder andaluz de IU recordó al presidente que el 18% de la población andaluza es pobre y de los 950.000 parados de la comunidad más de 300.000 no cobran ninguna prestación social.
Además, indicó que 12.000 familias han sido desahuciadas en lo que va de año, por lo que pidió a Griñán que abandone la lírica y pase a los hechos.
