El Jaén se llevó con bastante facilidad los puntos del Mediterráneo ante un Almería B que es último de la tabla por méritos propios. No fue un partido brillante de los jiennenses, tan sólo les hizo falta un poco de oficio y mucha facilidad de cara a la meta mal protegida por Gianfranco para hacerse con una victoria que les deja en los puestos altos de la tabla. Aunque sobre el césped del Mediterráneo era el conjunto de Arconada el que quería el balón, no creó demasiado peligro a lo largo de los 90 minutos. Su juego, bastante horizontal y monótono, les dio eso sí para vencer a un rival que no tiene argumento ninguno para salvarse. Los atacantes jiennenses hicieron pleno de cara a la portería contraria.
La primera parte fue muy aburrida en sus inicios, con un filial rojiblanco que quería aprovecharse de su velocidad y sacar tajada de una defensa visitante adelantada. Sin embargo, el balón era para los de Arconada que no lo perdían, pese a que les faltaba verticalidad. Hubo que esperar hasta pasados los primeros veinte minutos de choque para que llegara la primera ocasión de peligro, que iba a acabar en gol. El Almería B corría y corría detrás de los visitantes, que se acercaron por la banda izquierda gracias a una buena incursión de Villa. Su centro al área lo gana en el primer palo Hugo, que mete la puntera ante Joaquín y bate a un Gianfranco que no se atrevió a salir y ya nada pudo hacer para evitar el 0-1. Con el primer mazazo, los de Estévez trataron de venirse arriba y pudieron empatar. No tanto por su buen juego, que no existió, como por un Jaén que dio un paso atrás y concedió demasiado campo. Fran Pastor fue el primero que lo intentó con un centro chut, que obligó a Ramos a tocar el balón con la yema de los dedos para evitar el empate. Instantes después, Azeez se encuentra un rechace en la frontal del área y su disparo se marcha demasiado alto cuando tenía todo el tiempo del mundo para pararla, levantar la vista y colocarla. Estaba sufriendo el Jaén, se le había escapado el balón y pedía a gritos el tiempo de descanso, que llegó después de una nueva intentona local. Kiu se marcha de su par, pone el balón ante la llegada de Hicham, que chuta demasiado centrado y atrapa en dos tiempos el meta jiennense. Aunque el marcador no era justo por lo méritos de uno y de otro, lo cierto es que la efectividad es la que manda y ésa la tuvieron los visitantes.
Segundo tiempo
La segunda mitad comenzó por los mismo derroteros, con un Jaén que había montado la línea defensiva demasiado cerca de su área, lo que dio alas a los rojiblancos que seguían intentando igualar la contienda. Posiblemente la ocasión más clara del partido, más que los tres goles que marcó su rival, la tuvo Hicham a los 10 minutos de la reanudación. El exjiennense Montero peina un balón, el marroquí controla y regatea a Moreno y cuando tiene toda la meta ante sí para poner el cuero dentro de las mallas, se ciega y chuta al muñeco. El portero del Jaén se quedó sorprendido por el pelotazo que se llevó, puesto que veía que vendido a su suerte. Así se le acabó el gas a los locales, que iban a bajar los brazos pocos después. Cuando las fuerzas comenzaron a bajar por el fuerte calor que hacía ayer en Almería, Quesada y Ortiz se pusieron a jugar y el partido se acabó. Un magnífico pase interior del primero a Hugo se convertía en el 0-2 con un magnífico chut cruzado ante la salida a la desesperada de un Gianfranco que llevaba toda la segunda mitad sin tocar el balón. Poco después, el meta iba a volver a coger el esférico de las mallas con la sentencia del 0-3. Aguza se eleva más que Andie en un saque de esquina y pone a placer el tercero con un soberbio cabezazo dentro del área. Cambios locales para maquillar el resultado y visitantes para dar descanso. Con un disparo sin sentido de Guirao desde dentro del área, lo que representa la falta de ideas rojiblancas y el buen trabajo defensivo jiennense, se acabó un partido con victoria justa visitante, pero demasiado elevada en el marcador.