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La Feria 2015 dice adiós con un gran espectáculo de pirotecnia y música

Durante 16 minutos el público congregado en La Magdalena pudo disfrutar con el castillo de luces y colores.

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Un brillante espectáculo de pirotecnia y música ha puesto pasadas las doce de la noche el punto y final a una nueva edición de la Feria del Carmen y de la Sal 2015. El numeroso público que se dio cita en todo el entorno del paseo de La Magdalena pudo disfrutar de más de 16 minutos de un espectacular castillo de luces y colores, que incluso se llevó varias ovaciones durante su celebraión. La única pega es que la música se podía escuchar en la zona central cercana al pantalán, que era donde estaba montado todo el equipo, quedándose los laterales sin poder escuchar el espectáculo musical en toda su plenitud.

¿Y a partir de ahora qué? Pues a partir de ahora el nuevo Gobierno municipal se pondrá desde ya manos a la obra para analizar lo que ha funcionado, lo que no y, por supuesto intentar darle un empujón a una Feria que se tiene que volver a sentir el referente de la Bahía y su entorno cada mes de julio.

Ya, en este sentido, el responsable municipal de Fiestas, Jaime Armario, manifestó que  este año no se han podido introducir novedades ni llevar a cabo cambios importantes en la programación debido al poco tiempo que lleva el nuevo Gobierno local al frente de la Alcaldía, es decir, que estaba todo cerrado o casi cerrada por el gobierno saliente. “He celebrado ya una reunión con los caseteros y estamos de acuerdo en que hay que introducir importantes mejoras para impulsar la Feria y convertirla en la principal actividad del verano en la Bahía de Cádiz”, comentaba cuando presentó la programación de la presente edición que hoy toca a su fin.

El objetivo no es otro que consensuar con los que viven el día a día y a pie de albero lo que es la Feria isleña una Ordenanza nueva que le permita a la tradicional fiesta isleña recuperar el esplendor que tuvo antaño y que era sitio de referencia cada mediados de mes de julio.
Y precisamente recuperar parte de esa identidad pasa por elevar el número de casetas que cada año se montan en la Feria y que han ido decreciendo de manera considerable en la última década. En esta edición ha habido 41, dos menos que en 2014, cuando no hace mucho se llegaban a contabilizar hasta cerca de las 80.

Enemigo inesperado

Cambiar las costumbres no es fácil y máxime cuando la tradición siempre ha marcado que la Feria del Carmen y de la Sal se ha vivido de manera intensa de noche, básicamente porque por la mañana cuesta trabajo acercarse hasta el real con los rigores de la canícula que marca uno de los meses por excelencia del verano como es julio. Gobierno tras gobierno han intentado llevar a cabo iniciativas para que La Magdalena también viva con intensidad su Feria de Día, como sucede en otras localidades, pero lo cierto es que este año las medidas puestas en marcha han tenido al peor enemigo posible que ha sido la intensa ola de calor que ha azotado a toda España a lo largo de la semana.

Una circunstancia que se ha visto reflejada, y mucho, en actividades como el Día de la Mujer o la procesión marinera de la Virgen del Carmen, que este año no han contado con el respaldo de público que han tenido con anterioridad.

No y sí

El nuevo Gobierno municipal, con el poco poder de reacción que ha tenido, ha intentado empezar a introducir cambios con vistas a ediciones venideras de la Feria. Así, este año y pensando en que el que viene el Ayuntamiento estará en obras, se ha optado por trasladar la proclamación de las salineras al Parque Almirante Laulhé. Bien es cierto que el acto estuvo algo más deslucido que de costumbre, sobre todo porque la presencia de público no fue la misma que cada año se ha ido registrando en la plaza del Rey.

En el debe positivo está la decisión de la alcaldesa y su equipo de gobierno de premiar a entidades isleñas que trabaja en pro del civismo con  darles la oportunidad de ser los protagonistas en el encendido del alumbrado. Una experiencia que este año han tenido el honor de vivir los alumnos del CEIP San Ignacio como recompensa por su labor en pro de la concienciación medioambiental. Solo ver la cara de ilusión de los pequeños al darle al botón -y a la de la alcaldesa- mereció la pena.
En fin, cosas que pulir y muchas cosas que introducir para que la Feria del Carmen y de la Sal 2016 cotice al alza y, sobre todo, que el calor sea un poco más permisivo para que el disfrute tanto de día como de noche pueda ser total.

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