CÁDIZ CF BJosé Antonio, Álvaro Ramírez, Castaño, Tenorio, Jaime, Óscar, Miguel (Manu Sánchez, 81’), Carri, Román, Cisco (Carmona, 55’) y Canty (Héctor, 70’).
ARCOS CF Pablo, Borja (Heredia, 52’), Casillas, Romero, Adri, Iván Guerrero (Chato, 78’), Parada, Maqui, Zúñiga, Javi Forján y José Carlos (Juan Carlos, 46’).
Goles:
1-0 Miguel (8'). 2-0 Román (25'). 2-1 Dani Zúñiga, de penalti (37'). 3-1 Canty (46'). 4-1 Óscar (76').
Arbitro: Santizo Álvarez (Sevilla). Amonestó a Borja y Zúñiga por el bando visitante.
Incidencias: 41ª jornada del campeonato. Campo de fútbol de El Rosal en buen estado (césped natural).
Como ha venido ocurriendo en este final de liga, el Arcos no puede ni con la camiseta y cualquier enemigo que se le enfrenta se agiganta y aumenta hasta convertirse en un rival inaccesible, ya sea de arriba, mitad o debajo de la tabla, da igual. En Mairena, parecía que era el Arcos el que estaba en la zona de descenso y en El Rosal, ante el Cádiz B, más de lo mismo.
Tanto es así, que daba la impresión que era el Arcos el equipo que ya estaba descendido en vez de los pupilos de Fernando Niño, y eso que los filiales cadistas dieron claras muestras de ser un conjunto flojo en defensa y romo en ataque, pero fueron tantas las carencias, los errores y la endeblez física de los blancos que cualquier opositor le deja en evidencia. También es verdad que cuando se entra en una dinámica tan nefasta como la que sufre en estos momentos en conjunto del Barbadillo, todo se vuelve en contra y hasta el factor suerte, que también es importante en el deporte, le da la espalda. Nada más empezar el partido, a los diez minutos, ya había encajado el primer tanto. La reacción visitante no se hizo esperar y tanto Casillas, como José Carlos y Zúñiga pudieron poner las tablas antes de que Román lograse el segundo. El Arcos no marcaba ni a tiros y el Cádiz B lo hacía cada vez que se acercaba al área arcense. Zúñiga acortó desde los 11 metros antes del descanso, pero nada más regresar de los vestuarios, a los 28 segundos de la reanudación, el arcense Canty marcaba el tercero y hundía definitivamente a un equipo muy frágil en lo anímico y con escasa capacidad de reacción. En el minuto 75, Óscar ponía el 4-1 en el marcador y enterraba totalmente las ilusiones de puntuar de un Arcos al que la liga se le estaba haciendo eterna, pero que ha tenido un final feliz tras lograr la permanencia una temporada más.
ZONA MIXTA
El entrenador del Arcos C.F. hace balance de la permanencia conseguida y del desarrollo general de la temporada 2014-2015. "En un año tan difícil, conseguir el objetivo de la permanencia a falta de una jornada es todo un mérito para la familia arcense (directiva, jugadores y afición). Ha sido un año difícil que se ha solventado de una manera que a mí no me ha gustado, pero así ha sido aunque tenga una doble lectura: nuestro final de liga ha sido malísimo pero se ve que lo hemos hecho muy bien anteriormente para poder tener un margen de hasta cuatro semanas de derrotas y obtener la salvación en la penúltima jornada de liga".
Ha habido momentos muy difíciles en esta temporada y desánimo. Finalmente, se han podido superar todos los inconvenientes. ¿Con qué sensación te quedas? "Mi sensación es agridulce, si es que se puede decir así. Ha sido un año duro y con malos momentos y, personalmente para mí, muy duro en lo personal y también en lo profesional, aunque mis asuntos personales no tienen nada que ver con mi opinión pública, pero en lo deportivo, tengo que reconocer que me he encontrado muy solo a la hora de trabajar con un equipo de Tercera División tanto a nivel de cuerpo técnico como de poder entrenar con todas las garantías para hacer un buen trabajo. En los últimos dos o tres meses el equipo ha bajado mucho físicamente al no entrenar bien, no teníamos más de diez u once jugadores al día para entrenar y eso, para un entrenador que vive de su trabajo, le entristece. La salvación en la penúltima jornada en una liga tan complicada con cinco descensos es algo muy meritorio para el Arcos".
¿Sabes algo de tu futuro? "No, para nada, en ese sentido estoy muy tranquilo porque he realizado y completado con éxito -si se puede llamar así- la misión que me encomendó la directiva, que era salvar a este equipo en un año tan difícil. Lo he hecho lo mejor que he podido. Sé que habré cometido fallos y a cualquier persona que le haya molestado mi actitud o alguna palabra mía le pido perdón ante todo, pero todos somos humanos y cometemos fallos que, por mi parte, se pueden corregir. En cuanto al futuro, la verdad es que no me preocupa porque no está en mis manos, esa es una decisión que tiene que tomar el presidente, Pedro Corona, y su junta directiva, que sé que aunque está un poco tocado y cansado de haber trabajado tanto y tan bien -somos de los pocos equipos en Tercera que estamos cobrando al día- me parece que debería seguir de presidente. Por un lado, la decisión sobre si continúo o no la tiene él y, por otro, también depende de mí ya que deberían cambiar mucho las circunstancias para que yo siga".
