Ante el aumento de medidas de prevención extremas, la ONU quiso dejar patente que las políticas de algunos gobiernos para afrontar esta crisis son contraproducentes y causan daños socio-económicos innecesarios.
Ése ha sido el mensaje que el secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, y la directora general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Margaret Chan, trasladaron ayer a los 192 países miembros de la Asamblea General de la organización en una reunión convocada a solicitud de México.
“Se deben evitar reacciones exageradas que no ayudan a contener la propagación del (virus) AH1N1, y, sin embargo, causan daños a nuestras economías, sociedades y pueblos”, afirmó el máximo responsable de la ONU en su intervención.