Los singapureses apuran hoy las últimas horas para despedir al padre de la moderna Singapur, Lee Kuan Yew, en el Parlamento donde reposa el féretro con los restos del exmandatario fallecido el pasado lunes.
Más de 371.000 personas se han acercado a la sede parlamentaria en los últimos días para presentar sus condolencias, mientras que otras 700.000 lo han hecho en otros lugares habilitados en distintos lugares de la ciudad-Estado, según el canal Channel News Asia.
La espera en las colas frente al Parlamento se estima en unas cinco horas, que los singapureses aguantan estoicamente a pesar de la amenaza de lluvia.
Mañana, un carruaje militar con el féretro de Lee desfilará por las calles de Singapur hasta el Centro Cultural de la Universidad Nacional de Singapur, donde se celebrará el funeral de Estado.
Está previsto que asistan mandatarios como la presidenta surcoreana, Park Guen-Hye; el vicepresidente chino, Li Yuanchao, y los jefes de Gobierno de Japón, Shinzo Abe; Australia, Tony Abbott, e India, Narenda Modi.
El expresidente Bill Clinton presidirá la delegación de Estados Unidos, en la que también estará el ex secretario de Estado Henry Kissinger.
Lee Kuan Yew falleció el pasado lunes en un hospital de Singapur donde fue ingresado el 5 de febrero aquejado de una neumonía.
El exmandatario, que gobernó la ciudad-Estado entre 1959 y 1990, fue criticado por ejercer su gobierno con mano dura, mantener severas restricciones sobre la libertad de expresión y hacer que sus oponentes políticos estuvieran en la diana de la justicia.
Pero fue respetado y considerado como el arquitecto de la prosperidad económica de Singapur que convirtió en el objetivo de su Gobierno, a pesar de la falta de recursos naturales y la dependencia de Malasia.