El Athletic Club se ha impuesto al RCD Espanyol en San Mamés (3-1) liderado por Aritz Aduriz, que ha marcado el primer tanto y ha dado el segundo a Borja Viguera en una jugada más espectacular incluso que el espléndido disparo con el que Ander Iturraspe ha puesto el 3-0 antes de que Víctor Sánchez cerrase el marcador final.
Aduriz ha abierto el marcador con un tanto clásico en 'La Catedral', un córner botado desde la derecha por Markel y cabezazo del delantero en el punto de penalti, desviado por Cristhian Stuani cuando el balón parecía encaminado a las manos de Kiko Casilla; después, ha dado el segundo a Viguera tras un 'slalon' ante tres rivales que Viguera finalizó definiendo con clase y un sutil toque final.
Ya con el partido muy decantado a favor de los de Ernesto Valverde, Iturraspe ha enganchado un tremendo disparo desde unos 25 metros que ha golpeado en el palo izquierdo de la meta visitante antes de alojarse en las redes; y Víctor Sanchez ha completado el 3-1 finalizando a placer, a centro de Salva Sevilla, una jugada que no había sido capaz de concretar como debía en primera instancia.
Importante triunfo para el Athletic, que engancha su quinto partido liguero sin perder, 11 puntos de los 15 posibles en ellos y se aupa ya a la primera mitad de la tabla clasificatoria. En la que mejorará una o dos posiciones dependiendo de como acabe la jornada.
El Espanyol, por su parte, acaba con su idilio de los últimos años en San Mamés, tanto en el viejo como en el nuevo, y continúa con el deficiente rendimiento fuera de casa, donde solo lleva sumados dos puntos en seis partidos.
No obstante, su derrota ha sido más clara en el marcador que en el terreno de juego, donde ha tenido al menos tantas ocasiones como el Athletic. Pero no sacó partido de ello y se queda en la clasificación con el descenso acechándole.
Comenzó el partido sin apenas ritmo, con el Athletic apagado y con el Espanyol más decidido, con las ideas más claras y dispuesto a buscar alguna oportunidad. Como la que le apareció a Víctor Sánchez en el minuto 2 tras un despeje local a la frontal en jugada de estrategia, pero el disparo se le marchó alto.
El Athletic respondió también a balón parado, en un córner que peinó Iturraspe en el primer palo y al que la defensa se le adelantó a Viguera en el segundo.
Se cerró así el primer cuarto de y hubo que esperar caso otro para que, en el minuto 27, para la siguiente ocasión. Que fue una triple oportunidad de los periquitos, tras un buen pase de Lucas Vázquez a Sergio García.
En la primera se le cruzó De Marcos, que despejó hacia el brazo de Balenziaga; el segundo remate del delantero barcelonés García dio en Etxeita y Abraham remató desviado desde el borde del área en el tercer intento.
Perdonó el Espanyol en esa primera clara oportunidad y no lo hizo el Athletic en la suya. Una jugada, por otro lado, tan antigua como el viejo San Mamés. Córner botado por Susaeta y cabezazo de un Aduriz inexplicablemente solo en el punto de penalti. De todos modos fue decisivo el desvío final de Stuani a la red cuando el balón iba a las manos de Casilla.
El meta internacional fue el protagonista de la siguiente jugada que rondó su área, una caída de Aduriz ante su alocada salida a una zona de poco peligro que pareció un penalti claro, en el minuto 34.
Cuatro minutos antes Lucas Vázquez había malogrado la segunda gran ocasión de su equipo tras recibir un buen pase y no definir como requería la jugada ante un atento Iraizoz.
Y ya con el descanso a la vuelta de la esquina, en el minuto 44, el Athletic dejó medio sentenciado el choque con un golazo. La jugada de Aduriz, bajando el balón ante Álvaro, deshaciéndose de tres rivales después y dejando el balón sutilmente al espacio más tarde, ya fue de espléndida. Y Viguera la redondeó la jugada definiendo cruzado y perfecto ante un sorprendido Casilla.
La segunda parte comenzó como si el partido no se hubiese parado. Es decir, con el Espanyol acusando el duro golpe recibido y el Athletic, sobre todo Muniain, crecido con el resultado.
Esa dinámica provocó una reacción rápida de Sergio González, puso rápido a Caicedo y Salva Sevilla sobre el terreno de juego. Y, aunque se quedó aún más a merced del rival sin balón, los dos relevos le dieron más mordiente en ataque.
Así, un rechace en Caicedo ya dentro del área local le permitió a Stuani asustar a Iraizoz con un disparo muy ajustado al palo, aunque desviado; y Salva Sevilla se marchó de dos defensas en una diagonal que terminó disparando a la base del segundo palo de la meta local.
Hasta ahí llegó el Espanyol, que vio como Iturraspe certificaba la victoria local con un fuerte disparo desde unos 25 metros que acabó en las mallas de la portería del petrificado Casilla tras dar en el palo izquierdo.
Víctor García marcó el 3-1 en una jugada que comenzó mal él mismo, pero que acabó rematando al borde del área pequeña tras un buen centro desde la línea de fondo de Salva Sevilla.
