El PSE ha afirmado que el programa 'Hitzeman' del Gobierno vasco para facilitar la reinserción y resocialización, es "propaganda" y "nace muerto", puesto que no existe un acuerdo entre Gobiernos vasco y central para llevarlo a cabo. Por su parte, el PP cree que no es "exigente" con los terroristas, a los que se debe pedir "arrepentimiento" y no "autocrítica".
Por su parte, Bildu ha insistido en que Hitzeman constituye "una propuesta efectista", ha censurado que dé "por buena la situación existente" y ha instado a trabajar en las exigencias del Parlamento vasco sobre el fin de la dispersión y el reconocimiento de los derechos de los presos enfermos. Por su parte, el PNV ha considerado que este programa, "entre otros" son necesarios para la reintegración de los presos de ETA.
En un debate entre parlamentarios vascos celebrado en Radio Euskadi, recogido por Europa Press, el representante del PSE Txarli Prieto ha manifestado que "no se puede intentar reinsertar, sin que haya habido una asunción de responsabilidades" por parte de Sortu y la izquierda abertzale, algo que "está permitiendo el Gobierno de Urkullu".
A su juicio, "en vez de ser exigentes" para crear una condiciones que lleven a la reinserción, "esto se deja como aparte". "Parece que el problema que puedan sufrir los presos de ETA es un problema aislado de la realidad en la que se ha vivido en las últimas décadas", ha apuntado.
Además, ha considerado que, si no existe un acuerdo entre el Gobierno vasco y de España, el programa "es fallido", porque "mientras no se puede entrar en las cárceles, es imposible que esto se pueda producir". "Más allá de las competencias, sería imprescindible un acuerdo político", ha afirmado. Por ello, considera que Hitzeman "nace muerto, limitado y sin demasiada perspectiva".
Prieto ha censurado, también, que Hitzeman se oriente a "justificar" el 'staff' que Iñigo Urkullu ha designado para abordar estos asuntos. "Somos muy críticos con este programa. No porque no estemos convencidos de la necesidad de la reinserción, pero lo que se ha puesto encima de la mesa tiene gran apariencia y poco fondo", ha lamentado.
El parlamentario socialistas ha asegurado que "la reinserción ya está establecida en nuestro estado de derecho" y ha apuntado que "lo que es nuevo es un plan Hitzeman liderado por Urkullu".
Según Prieto, la reinserción es, además, "un acto muy complicado que necesita de discreción" y no se debe sustituir por "propaganda" destinada a "justificar un 'staff' que ha montado el lehendakari con una serie de gente y que, de vez en cuando, tiene que hacer literatura". "Es un programa que nace muerto", ha insistido.
PROBLEMA DE PARTIDA
Por su parte, el parlamentario del PP Carmelo Barrio ha considerado que "como la mayoría de las iniciativas de Jonan Fernández", el programa Hitzeman "tiene un problema de partida". "Le gustan las ruedas de prensa, menos venir al Parlamento para decir cómo, por qué y para qué. Eso no lo hace", ha criticado.
A su juicio, la iniciativa constituye "una palabrería unilateral del señor Fernández y el señor Urkullu", y no constituye "un plan de fondo". "Una autocrítica la hace una persona normal. Un preso lo que tiene que hacer es un arrepentimiento", ha dicho, para asegurar que Hitzeman es "un coladero de apariencias" con "falta de exigencia a los terroristas".
Barrio ha recomendado "hacer un trabajo político" y pedir a Bildu que asuma y reconozca "errores" del pasado. "Estas cuestiones no son de titular de prensa, sino de venir al Parlamento a currárselo, y eso no lo ha hecho el señor Fernández. El PNV no es exigente con Bildu y tampoco con el mundo de ETA", ha lamentado.
BILDU
Por su parte, el portavoz de EH Bildu Oskar Matute ha afirmado que el "problema" de Hitzeman radica, entre otros aspectos, en que "no es un plan", sino "un programa de recomendaciones" y una "declaración, no ya de intenciones, sino de opinión".
"Ha podido tener un cierto recorrido en lo mediático, pero en lo práctico, no ofrece nada nuevo, nada sustancialmente diferente a lo que ya hay y que sea viable", ha censurado.
Para Matute, en primer lugar se debe abordar lo que el Parlamento vasco "ya ha expresado", y que "poco tiene que ver con lo que Hitzeman refleja", que consiste en "dar por buena la situación existente y, a partir de ahí proponer sin ninguna capacidad práctica real".
"El Parlamento se ha pronunciado de manera muy clara en contra de la dispersión, de los derechos de los presos, y ahí es donde habría que trabajar y articular una demanda socialmente cada vez mayor en favor de un cambio de una política penitenciaria que, sobre todo, encuentra anclaje en la reforma que hizo Aznar en 2013", ha dicho.
En su opinión, "se desoye" a los presos y se obvia "la interposición de más de 65 recursos" que "de manera individual habían solicitado a Instituciones penitenciarias".
El parlamentario de la coalición soberanista ha asegurado que "existe la voluntad" de "caminar hacia una situación diferente a la actual, bastante sangrante", mientras el Gobierno vasco "opta por decirnos una serie de cuestiones que no dependen de ellos y no alteran una realidad injusta".
"Ahí es donde está el núcleo del debate, no tanto en propuestas efectistas que ocuparán espacio en los medios de comunicación pero que se revelan como una mera declaración de intenciones y no como una acción de gobierno que resuelva los problemas", ha insistido.
PNV
El portavoz parlamentario del PNV, Joseba Egibar, se ha mostrado convencido de la necesidad del programa Hitzeman "entre otros" y ha admitido que aunque el Gobierno vasco "no puede decidir cuándo un preso sala a la calle", sí puede hacer usos de "sus herramientas" en materia de prisiones y reinserción social "conforme a la legislación general".
Tras puntualizar que se trata de "procesos personales de reinserción", ha afirmado que la "cuestión penitenciaria tiene dos vías de trabajo". "Por un lado, la que se refiere a la política penitenciaria, que hemos reiterado hasta la saciedad que hay que despojarla de esa condición excepcional. No usarla como un elemento de lucha antiterrorista, que ha hecho el PP y PSOE", ha dicho.
Por ello, se debe "llevar", según ha dicho, a "unos parámetros lógicos de lo que puede ser una resocialización, reinserción o reintegración". "Ésa es la vía, y el Gobierno vasco ha desarrollado los programas que pueden suponer un proceso personal de reinserción", ha asegurado.
Egibar cree que las razones que ha esgrimido Sortu para rechazar esta iniciativa del Gobierno podrían ser suscritas por el delegado del Gobierno vasco en el País Vasco, al afirmar que "es un brindis al sol" o que el Ejecutivo carece de competencias, "de soporte legal o estatutario".
"Se trata de abordar una materia que afecta a la sociedad vasca, a la que irán los presos cuando se reintegren. El Gobierno vasco dice que puede ayudar personal y legalmente a todas estas personas a trazar itinerarios de reinserción", ha explicado