El comité de empresa de Vinnell-Brown & Root Spain' (VBR), la sociedad que gestiona los servicios civiles de la base aérea de Morón de la Frontera (Sevilla) para las Fuerzas Aéreas de Estados Unidos en Europa (Usafe por sus siglas en inglés), ha manifestado que el desmantelamiento de la plantilla española de la base hace dudar de la "rentabilidad" de la base para la sociedad de esta comarca de la provincia de Sevilla donde Estados Unidos, a su juicio, se aprovecha de la "miseria" del pueblo.
En un comunicado recogido por Europa Press, el comité de empresa analiza las circunstancias que rodean al nuevo expediente de regulación de empleo (ERE) promovido por VBR sobre los servicios civiles de estas instalaciones militares ubicadas en el término municipal de Arahal y cuyo uso comparten España y Estados Unidos. Se trata, como venimos informando, del tercer ERE que afronta la plantilla española de la base de Morón.
Y es que después de un primer ERE zanjado mediante acuerdo allá por finales de 2010, cuando fueron extinguidos 119 puestos de empleo, la empresa consumó en septiembre de 2013 un nuevo despido colectivo sobre 66 trabajadores, aquella vez sin acuerdo, y actualmente promueve un nuevo expediente de regulación de empleo para desprenderse de 55 empleados.
El segundo ERE, el de 2013, surgía en un escenario en el que Estados Unidos había decidido ampliar su presencia militar en la base de Morón de la Frontera con el despliegue de 500 infantes de marina y ocho aeronaves, toda vez que tras ser consumados los despidos, Estados Unidos ampliaba aún más su presencia militar en Morón para sumar 850 infantes de marina y 17 aeronaves en estas instalaciones.
Con esta secuencia histórica sobre la mesa, el comité de empresa de VBR explican que el despliegue militar de 2013 no requirió ratificación por parte del Congreso de los Diputados porque "no superaba el máximo de tropas que fija el convenio bilateral de defensa" firmado entre España y Estados Unidos, un convenio que en 2012 era objeto de una "enmienda" autorizada por el Gobierno central para permitir el despliegue de cuatro destructores estadounidenses en la base aeronaval de Rota (Cádiz), extremo que habría supuesto la llegada a estas instalaciones de la "Flota de Seguridad y Antiterrorismo, una compañía de marines estadounidenses encargada de la seguridad de las instalaciones y embajadas de EEUU".
MÁS PRESENCIA MILITAR EN ESPAÑA
"Se desconoce el número de marines con los que cuenta esta unidad en Rota, pero es de 'suponer' que se mantiene dentro del límite que estipula el convenio bilateral", explican los trabajadores de la base aérea de Morón, según los cuales "EEUU está reduciendo sus tropas en Europa para centrarse en el Pacífico, pero no aplica esta pauta en España, sino que intensifica su presencia tanto con la ubicación en Rota de su escudo antimisiles, como con un aumento de tropas de élite con funciones de gestión de crisis y situaciones de alto riesgo en Morón".
Para el presidente del comité de empresa de VBR, José Armando Rodríguez (UGT), "todos sabemos que Andalucía es una de las regiones donde más se ceba el paro y se da la circunstancia de que ambas bases de utilización conjunta se encuentran en nuestra tierra. Es lamentable tener que decirlo, pero EEUU se aprovecha de la miseria social existente en Andalucía, de una reforma en materia laboral depredadora y de una respuesta política débil tanto de la Junta de Andalucía, como del Gobierno central, para chantajear con la pérdida de más puestos de trabajo".
"Todos suponemos que al haber más militares y más aviones, lo lógico es que se crease empleo en la zona, pero ocurre todo lo contrario y estamos ante el tercer ERE y sospechamos que quedan, al menos, dos más antes de junio de 2015", recalca con claro tono de "frustración". "La estrategia de EEUU es muy clara: primero consiguen que una comarca entera dependa económicamente de ellos, luego imponen sus condiciones en todos los ámbito y crean la cultura de que son imprescindibles. Al no existir alternativa porque ellos son los únicos que pueden dar empleo, tampoco hay protestas en contra de las bases. Todo esto no es más que un ejemplo más del microimperialismo militar y económico de EEUU".
"Desde la plantilla no vamos a permitir que Estados Unidos haga lo que le venga en gana en territorio andaluz. No me imagino qué ocurriría si esta situación se estuviese dando en Euskadi o Cataluña. Para empezar, me cuesta imaginarme bases americanos en dichas regiones", dice el presidente del comité de empresa, quien avisa de que "según los propios alcaldes de la zona, la base restringe el crecimiento y la diversificación económica y se está llegando a un punto en el que hasta los propios trabajadores españoles cuestionan la 'rentabilidad' de cesión de soberanía de España a Estados Unidos".
LOS "OÍDOS SORDOS" DE MORENÉS
Rodríguez afirma que "hasta la fecha, el ministro de Defensa ha hecho oídos sordos a nuestras reclamaciones a pesar de conocer nuestra situación desde hace un año, coincidiendo con el ERE de 2013. No sólo no ha resuelto la situación, a pesar de haber coincidido con los representantes de los trabajadores en marzo de 2014 en Sevilla y, a petición propia, en julio de este mismo año en Madrid, en que las bases han de proporcionar empleo estable, sino que ha autorizado hasta 900 marines y 18 aviones en la Base de Morón, duplicado el número del pasado año. Además, hay sospechas de que se va a volver a modificar, a petición del Gobierno de EEUU, el convenio bilateral para otorgar un carácter permanente a la misión de los marines en Morón sin tener en consideración la situación de los trabajadores españoles, que han pasado de 600 en 2010 a poco más de 300 en la actualidad".
"Si los americanos vienen aquí para usar nuestras bases y no sólo no mantienen el empleo existente, sino que lo destruyen masivamente, no tiene sentido la cesión de soberanía. La solución a todos nuestros problemas pasa, ineludiblemente, por la vía política", advierte Rodríguez, según el cual "si los 'primeros espadas', los políticos que de verdad tienen que dar un golpe en la mesa para que EEUU se avenga a razones y respete a los trabajadores, se esconden detrás sus subalternos, pues no nos va a quedar otra que hacernos notar".