Han pasado tres mayos y el 15-M se ha diluido en Jaén, pero no su espíritu y la sed reivindicativa de numerosos colectivos que, desde entonces, se hacen más visibles.
Desde hace un año nada queda de la Plataforma Democracia Real Ya (DRY), impulsora del movimiento 15-M en la capital y que logró convocar a centenares de ciudadanos con un denominador común, movilizarse de forma pacífica y decir alto y claro su mensaje: hay que promover una democracia más participativa.
Siempre defendieron que bajo un sentimiento común y pacífico de unidad ciudadana, más allá de las obsoletas etiquetas ideológicas y partidistas, en Jaén nació la reivindicación plural de unos derechos básicos, comunes y equitativos a todos. “Fueron momentos mágicos y los recuerdo como un lucha pacífica por el cambio y por huir del estado de malestar de la ciudadanía en general”, ha valorado a
VIVA JAÉN, Andy Molina, ciudadano que formó parte de la Plataforma DRY y que ahora forma parte, de manera individual de la Plataforma 22-M, recientemente constituida en el contexto de las marchas por la dignidad.
Y es que es lo que ha ocurrido en la ciudad, donde han proliferado plataformas ciudadanas que luchan por la igualdad educativa, económica, social, en la vivienda y en múltiples ámbitos de la sociedad en general.
En la ciudad no se celebra hoy ninguna actividad conmemorativa por el 15-M, pero el espíritu sigue y la ciudadanía sigue elevando su voz a las esferas del poder. Movimientos como la Plataforma 22-M, la Asamblea Ciudadanos, el proyecto Reacciona, la Asamblea Antirrepresiva, Frente Cívico y la Asamblea Independiente de Estudiantes, son algunos ejemplos de lo que queda del 15-M y de lo que siempre ha existido en la ciudad y ahora es más fuerte y lucha con más ímpetu por ser escuchado como el propio movimiento vecinal con Federaciones como Objetivos Comunes (OCO).
Defienden el desarrollo de la capital plataformas como 'Por un PGOU para la ciudadanía', que engloba distintas asociaciones con el fin común de trabajar por el bien de la capital y su crecimiento y desarrollo.
Los fines siguen
La eliminación de los privilegios de la clase política, la lucha contra el paro, el empleo precario y la reforma laboral actual; la apuesta por una gestión de calidad y una postura contraria por la mercantilización de los servicios públicos; la regulación de las acciones bancarias que atenten contra el bienestar ciudadano, la exigencia de las libertades ciudadanas y de una democracia participativa eran, entre otros, los principios defendidos por los indignados del 15-M, y que ahora otros colectivos, siguen promoviéndose en la ciudad.
En Jaén sí que hay colectivos que promueven una sociedad responsable y comprometida.
