La clínica veterinaria Santa María lleva colaborando con el Zoo Botánico de Jerez más de diez años. Esto ha propiciado que, esta semana, se haya producido un apadrinamiento por parte de la entidad privada, ubicada en El Puerto, de una de las especies del zoológico. Concretamente, se ha tratado del panda rojo, seleccionado por su carácter risueño y por lo que representa el propio animal. “Venimos colaborando con el zoo desde hace más de diez años y ahora se nos ofreció la posibilidad de apadrinar a una mascota y decidimos decantarnos por el panda rojo, porque son animales agradables que siempre que pensamos en ellos nos despiertan una sonrisa”, ha explicado el gerente de la clínica, Juan Ramón Cotillas.
Esta colaboración existente desde hace más de una década, se traduce en actuaciones habituales, debido a la gran especialización, no sólo de los trabajadores del centro, sino también del material del que disponen en sus instalaciones ubicadas en la calle Cigüeña. “Siempre que ha habido que hacer alguna intervención especializada o que requiriera de material técnico, hemos colaborado con el zoo, ya que la clínica se encarga de muy diversas ramas y disponemos de unos equipos de muy alto nivel”, profundiza Cotillas.
En este sentido, esta institución no es una ‘clínica veterinaria al uso’, ya que además de las mascotas que habitualmente se encuentran en nuestros hogares, los especialistas han tratado todo tipo de especies. “Hemos realizado intervenciones a tigres blancos, linces, chimpancés, guepardos… hemos realizado endoscopias a diversas especies de aves y hemos tratado patologías extrañas y comunes a todo tipo de animales”, ha señalado el gerente de la clínica.
Así, y para tratar diversas patologías a muy diferentes especies, los especialistas veterinarios del centro se han formado y continúan haciéndolo. Igualmente, han trabajado en distintos puntos del globo con las especies autóctonas del lugar como El Congo o Zimbaue, así como países de Europa y dentro de nuestras fronteras con zoológicos de muy diversa índole. Y, de hecho, “seguimos moviéndonos cada vez que nos lo solicitan”.
Con este apadrinamiento, y como ha apuntado el gerente Juan Ramón Cotillas, se consolida “el intercambio de servicios y conocimientos entre un centro público y privado, algo que enriquecerá la labor de ambas instituciones”.
