La Alameda de Hércules se convirtió ayer en un ‘escenario de batalla’ pacífica, eso sí, en el que se celebraron numerosas actividades lúdicas y reivindicativas con las que la plataforma No Parking Alameda -que reúne a 25 asociaciones y cerca de 200 vecinos contrarios al aparcamiento subterráneo planeado en este emplazamiento por el gobierno municipal- mostró su rechazo por enésima vez al proyecto de modificación puntual del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de 2006 con la que se podría realizar dicha obra.
La guerra por los diferentes intereses entre el Ayuntamiento y asociaciones y vecinos fue escenificada con una “gran batalla de agua” en torno a un barco pirata de madera y cartón disfrutado por niños y mayores, con el que quisieron simbolizar la defensa de este espacio público en el que ya se han vivido varios intentos frustrados (en 1962, 1975 y 1998) de construir “un aparcamiento innecesario”.
“Esta obra, además de costosa económicamente y complicada desde el punto de vista técnico, es completamente innecesaria diga lo que diga el alcalde, ya que los aparcamientos rotatorios que existen en el centro tienen plazas libres el 98% del tiempo”, señaló a Viva Sevilla Kiko Sánchez, portavoz de la plataforma No Parking Alameda. Además explicó que ayer pasaron por el bulevar cerca de 6.000 personas, las cuales participaron en los juegos deportivos, conciertos, bailes y hasta de un ‘flashmob’.
En esta jornada de protesta, similar a la realizada por la misma plataforma en mayo del año pasado, se recogieron firmas con distintos objetivos. Unas, en rechazo al parking subterráneo (de las que según los organizadores llegaron a las 1.700 firmas); y otras, para la nueva iniciativa que la plataforma quiere poner en marcha: la declaración de la Alameda de Hércules como Bien de Interés Cultural (BIC), en la categoría de Sitio Histórico, para la que también se recogieron en torno a 1.700 rúbricas. “El bulevar de la Alameda es el jardín público más antiguo de Europa y el segundo del planeta”, señaló Sánchez, que también indicó que la acción llevada a cabo ayer será la última realizada en la calle, ya que a partir de ahora comenzarán con “alegaciones a la modificación del PGOU”.
“Estamos pensando regalar al alcalde un libro de geografía para que vea que la Alameda pertenece al centro y sí tiene identidad. También queremos recordarle que este parking sólo interesa a los empresarios de Sierpes, Tetuán y alrededores, así como exigirle información precisa de cómo pretende realizar el aparcamiento, ya que siempre se ha negado a recibirnos”, finalizó.
Informe contrario de Patrimonio
Recientemente, la Comisión provincial de Patrimonio Histórico, dependiente de la Consejería de Cultura y Deporte, informó desfavorablemente sobre la modificación del planeamiento urbano promovida por el Ayuntamiento para autorizar nuevos aparcamientos subterráneos de rotación en el casco histórico. Fue en un informe redactado el 3 de abril en el que señaló que supondría “una alteración del modelo de accesibilidad al conjunto histórico y del sistema de aparcamientos previsto para este ámbito”.
Apoyo de la oposición a los vecinos de la Alameda
Al rechazo rotundo de los vecinos y de las asociaciones contrarias al proyecto del parking rotatorio de la Alameda previsto por Zoido, se sumó ayer el de los principales grupos de la oposición, que quisieron acompañar a los vecinos en su jornada reivindicativa. Así, durante este domingo fueron varios de los miembros del PSOE y de IU que se acercaron al bulevar de la Alameda y que dejaron plasmadas sus firmas en contra del parking.
Entre ellos, el portavoz de los socialistas hispalenses, Juan Espadas, y su homólogoen IU, Antonio Rodrigo Torrijos. “Estamos aquí para mostrar nuestro apoyo a la lucha de cientos de vecinos por la defensa de una Alameda habitable y sostenible”, manifestó Torrijos, quien criticó la intención del PP de “abrir nuevamente en canal” este espacio.
“Me parece absolutamente inaceptable que, frente a la opinión de los vecinos y frente al sentido común, el señor Zoido se empeñe en sacar adelante una actuación, sustentada en el negocio y en la especulación, que supondrá el regreso del tráfico rodado y contaminante a la zona y que convertirá a la Alameda otra vez en un lugar tomado por el coche privado”, advirtió, a lo que recordó que este proyecto “no estaba en su programa electoral, por mucho que el alcalde lo asegure ahora de forma falaz”.