No debe ser fácil estar continuamente en el punto de mira de la afición y encajar una media de 2 o 3 goles por encuentro. Sus criticadas actuaciones conllevaron a que Alejandro fuese por primera vez suplente esta temporada en la pasada jornada de Liga contra el Guadalajara. “Sergi decidió cambiar algo del equipo y en este caso fue la portería. Todos tenemos opciones de jugar y se ha demostrado que puede jugar cualquiera” manifestó ayer el meta asturiano con tono desinflado en los micrófonos de Cadena Ser.
El último encuentro que disputó fue el fatídico 2-5 en el Nuevo Colombino frente al Sabadell, un choque “del que salí bastante tocado. Recibí cinco goles y eso es algo que no le gusta a un portero. Fue un partido para olvidar”, ya que se sintió el joven “muy nervioso” e incluso “algo incómodo”.
Tirar para adelante
El cancerbero recreativista reconoció sobre la titularidad de Jesús Cabrero que “estuvo bien y me alegro por él” aunque advirtió que “voy a demostrarle al míster que sigo ahí. Soy una persona muy cabezota y entreno para volver a ser titular”.
Intenta romper con la dinámica negativa gracias al “apoyo” de su entorno. También el estilo de juego del Decano no favorece las labores de un portero porque “se juega muy al límite y se encajan muchos goles”.
Por otro lado, esta es la segunda campaña de Alejandro en Huelva y cree que en esta temporada “hay un cambio significativo de imagen. Cada uno su estilo y son todos válidos”, además, el jugador insistió en que “con Álvaro Cervera el equipo estaba muy trabajado, sabíamos lo que hacíamos y ahora es un estilo totalmente diferente”.
Por último del rival del domingo declaró que “son incómodos y tienen al pichichi”.