La Fiscalía provincial de Cádiz ha solicitado una pena de cinco años de prisión para un hombre, que será juzgado en la Audiencia Provincial en la segunda semana de este mes de noviembre, que supuestamente prendió fuego a una vivienda abandonada, ocupada en ese momento por varias personas, en represalia porque alguien le había quitado a su perro.
Según el escrito de calificación fiscal, los hechos tuvieron lugar en la madrugada del día 26 de enero de 2011, cuando el acusado, A.R.S., en represalia porque le habían quitado a su can, procedió, tras amontonar basura, y con un trapo y una estufa, a prender fuego a un metro escaso de la puerta principal de acceso a la vivienda donde habitaba, situada en la calle Batalla del Ebro de San Fernando, y que se encontraba abandonada. En ese momento, se encontraban durmiendo en su interior varias personas, además de su pareja.
El acusado acudió posteriormente al hospital de San Carlos de la localidad para comunicar lo que había hecho, siendo alertada la Policía y los Bomberos, que acudieron al lugar para desalojar a los que allí habitaban, pudiendo sofocar el incendio sin que hubiese que lamentar daños personales.
Como consecuencia de estos hechos, se causaron daños en la vivienda que fueron tasados en 215 euros, una cantidad que no ha sido reclamada.
En sus conclusiones médico legales, los forenses que examinaron al acusado manifestaron que este padece dependencia del alcohol "de muchos años de evolución" y que, en su opinión, en el momento de los hechos no se encontraba con sus capacidades volitivas e intelectivas a consecuencia de dicha patología.
Los hechos narrados son constitutivos para la Fiscalía de un delito de incendio, solicitando una pena de nueve años de prisión para el acusado "para el caso de que se condene", al concurrir, además, el atenuante de grave adicción al alcohol.
