El fiscal de Vigilancia Penitenciaria de Sevilla, Luis Fernández Arévalo, ha explicado hoy a los periodistas que el descenso de la población reclusa también se debe a la expulsión, en vez del encarcelamiento, de los extranjeros que delinquen, y ha precisado que también bajaron los presos en España de 73.929 a 70.472.
Además, el porcentaje de internos por celdas bajó por segundo año, con 1,25 por celda en vez de 1,42 del año anterior, según el fiscal, quien ha subrayado que el nuevo juzgado de vigilancia penitenciaria que empezó a funcionar el año pasado ha hecho que cada uno atienda a unos 1.500 reclusos, la mitad que en 2010, cifra que sigue siendo superior a la media nacional, fijada en 1.381.
En la provincia sevillana existen las cárceles de Sevilla-1 y Sevilla-2 (conocida como la de Morón), además del Centro Penitenciario de Mujeres de Alcalá de Guadaíra, el Hospital Psiquiátrico Penitenciario y el Centro de Inserción Social Luis Jiménez de Assua, que incluye una unidad de madres.
De los permisos concedidos el año pasado, 29.940, el índice de quebrantamientos se situó en 1,1 por mil, ninguno de ellos del psiquiátrico, mientras que el total de liberados condicionales controlados por los servicios de gestión de penas y medidas alternativas se fijó en 490 frente a los 423 de 2010.
Los datos de la memoria recogen que en 2011 hubo 2.926 mandamientos judiciales de ejecución, casi mil menos que el año anterior, 2.859 planes definidos elevados al juzgado de Vigilancia Penitenciaria para aprobación y 1.552 cumplidos.
Según la tipología delictiva, en 2011 hubo 2.219 delitos contra la seguridad vial, 1.357 menos que en 2010, y 347 de violencia de género, 128 más que el año anterior.
El fiscal ha señalado que en 2011 se registraron 12.235 expedientes frente a los 13.420 de 2010, los 10.232 de 2009, 5.668 en 2008 y 5.456 de 2007, y ha agregado que este año hay pendientes de resolución 978 expedientes.
Respecto a las salidas al hospital de internos, en Sevilla-1 hubo un 34,68 por ciento de fracasos de las 1.016 solicitadas por falta de escolta policial, frente al 5,1 % de fracasos registrados en Morón de las 1.676 pedidas.
Por prisiones, la de Sevilla-1 tiene 311 presos preventivos, y los delitos más comunes de los reclusos son contra la salud públicas, con 306; 242 por robos; 143 por hurtos y 124 por lesiones, y la mayoría de los penados cumplen sentencias de entre tres meses y tres años, con 471 de los 1.203 internos, con 679 presos entre 21 y 30 años.
En esa misma cárcel hay 16 internos por asesinato y 24 por homicidios y tres por terrorismo.
En Morón, con 1.487 internos, la mayoría lo están por hurtos (608) y 265 por tráfico de drogas, mientras que tiene 39 por homicidio y 65 por asesinato; el psiquiátrico tiene a 24 por homicidio y 31 por asesinatos, y el de mujeres de Alcalá acoge a siete reclusas por homicidio y a una por asesinato.
