El objetivo de estos trabajos, con los que se da cumplimiento a lo establecido en la carta arqueológica de la ciudad, es retirar las losas de hormigón existentes en la zona para delimitar el espacio en el que en una segunda fase se habrá de ejecutar la preceptiva excavación, dado que en este sector de la ciudad se asienta la antigua necrópolis.
Esta primera parte de las labores, que tendrá una duración estimada de entre una y dos semanas, estará dirigida por el arqueólogo municipal, Rafael Jiménez-Camino, y a ella le seguirá la segunda fase, que se prolongará durante tres meses, siendo ya ejecutada por una empresa especializada. Este proyecto supondrá un coste aproximado de 400.000 euros, y corre a cargo de la Fundación Campus Tecnológico.
Asimismo, con estas catas se podrá conocer el límite norte del antiguo cementerio meriní, dato con el que aún no se cuenta. De esta manera, el Ayuntamiento da un nuevo paso en su impulso del proyecto de puesta en marcha del Campus Tecnológico, tras la cesión totalmente gratuita de esta parcela, que cuenta con una superficie de 1.505 metros cuadrados