El alcalde de Chiclana, José María Román, ha presidido la reunión de la Federación de Municipios y Provincias (FEMP) para impulsar Chiclana como villa termal, una de las más singulares de España, con el único balneario de la provincia de Cádiz y también de Andalucía Occidental.
Precisamente en estas características se ha fijado la FEMP para elegir Chiclana entre los seis municipios españoles seleccionados como experiencia piloto para impulsar el termalismo. Una iniciativa que ha encontrado el respaldo de los fondos europeos y el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia.
José María Román ha agradecido a la FEMP que haya escogido Chiclana entre las ciudades y los más de 90 balnearios que operan en España, “porque Chiclana es muy singular dentro de la red porque la mayoría están en el interior y en localidades de menos de 2.500 habitantes y nosotros somos un destino de costa, dentro de una gran ciudad que no olvida su historia ni su cultura termal”.
Muestra de ello es que el próximo 25 de noviembre se presentará en la Biblioteca García Gutiérrez el libro `Memoria de los balnearios de Chiclana. Dirección de baños y aguas minero-medicinales (1844)´. Una obra de Antonio Uceda Pinel con la intervención de los editores de José Antonio Ureba y José Luis Aragón Panés, quien apunta que “eran unos tiempos en los que los baños suponían una aportación de riqueza muy relevante para la villa, justo por detrás de la industria vitivinícola. Hay que pensar que muchos vecinos alquilaban sus casas a los clientes”. La editorial Palitroque respalda esta novedosa investigación.
En el encuentro, el alcalde ha estado acompañado por la primera teniente de alcalde, Ana González; la delegada de Turismo Sostenible, Manuela Pérez Izeta; la presidenta de la Plataforma de Comerciantes de Chiclana, Ana Belén Mota; el propietario del balneario de Chiclana, Miguel Mirones, así como representantes del sector empresarial de la ciudad. Una cita promovida por la FEMP que se está apoyando en Archena, Arnedillo, Baños de Montemayor, Chiclana, Lobios, O Grove y Trillo para elaborar un plan de acción que explore todas las posibilidades de este tipo de turismo y sirva para todas las villas termales.
Con vocación sanitaria
Miguel Mirones ha resaltado que Chiclana “es la única villa termal de la provincia de Cádiz y de Andalucía Occidental, así que somos un referente en esta zona y no vamos a competir con la oferta de bienestar de los hoteles, que es muy importante; nos vamos a diferenciar porque somos los únicos con unas prestaciones sanitarias y terapéuticas, respaldadas por un equipo médico”.
Revitalizar la imagen
El proyecto busca reforzar la identidad cultural de los pueblos y ciudades con aguas mineromedicinales, que los clientes de los balnearios aprovechen los recursos naturales y culturales del entorno y que la ciudad también se beneficie de estos visitantes que llegan para disfrutar de un turismo tranquilo, en todas las épocas del año. Entre los retos también se encuentran revitalizar la imagen del turismo termal en España y garantizar la accesibilidad y la inclusión en el termalismo.
La Red de Villas Termales se fundó en la década de los 90 y en ella están incluidas 74 corporaciones locales de diversas comunidades autónomas que utilizan aguas mineromedicinales, bien a través de balnearios, que cuentan con pozas o con plantas embotelladoras.
Precisamente sobre este punto hizo hincapié Miguel Mirones, reclamando un uso y una promoción diferenciada de aquellas villas termales que tienen balnearios, de los que tienen pozas o destinan las aguas mineromedicinales a otros usos.
Entre las futuras líneas de trabajo está la investigación de las propiedades del agua y sus beneficios terapéuticos o la diversificación de las experiencias turísticas, una variable en la que Chiclana cuenta con ventaja, por los numerosos eventos que se organizan para el público, como ha relatado Manuela Pérez y que sirven para los usuarios del balneario disfruten de una experiencia más enriquecedora en la ciudad.
Termalismo y deporte
También se apuntó como vía de crecimiento ofrecer el balneario a los deportistas extranjeros que visitan Chiclana durante el otoño y el invierno.
El proyecto de la FEMP contempla un plan formativo para los profesionales del sector turístico y está previsto que termine en marzo de 2025. No obstante, Laura Gutiérrez, técnico de gestión de la FEMP, mostró la necesidad de darle continuidad porque en el diagnóstico de las villas figura que casi la mitad no cuenta con un plan estratégico, ni dispone de técnicos especializados en turismo o en sostenibilidad, entre otra carencias, por tratarse de localidades pequeñas.
El objetivo del plan es crear un modelo de turismo termal como referente para las demás villas, que no solo ofrezca experiencias turísticas sino que impulse la calidad de vida en los territorios y la experiencia de los visitantes, convirtiendo a España en un destino líder del turismo termal sostenible.
